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El ayuntamiento repara la calefacción de la biblioteca a raíz de quejas de usarios

La climatización se alimentará con pélets y sin apenas gasto -Reparar la caldera de gas dañada hace semanas suponía un gasto de 4.000 euros y fue descartado por el gobierno

Usuarios de la biblioteca de Lalín, ayer, con prendas de abrigo. // Bernabé/Gutier

Usuarios de la biblioteca municipal Varela Jácome de Lalín llevan una temporada sin calefacción, cuestión que provocó las quejas de usuarios. Ayer mismo podía verse a jóvenes estudiando o realizando consultas en la biblioteca provistos de prendas de abrigo, pues la climatización no funciona por una avería en la caldera. Mientras algunos usuarios aseguran que este problema se arrastra desde hace "dos meses", el grupo de gobierno indica que hace un par de semanas llegó al consistorio un escrito en este sentido.

En todo caso la problemática será solventada, según fuentes del ejecutivo local, ya esta misma semana. Ayer mismo el alcalde, Rafael Cuiña, se desplazó a la biblioteca para conocer unas carencias que ya habían sido evaluadas por los técnicos municipales para buscar una alternativa. La caldera de gas que suministraba a los radiadores sufrió una avería hace tiempo y para compensar este problema se habían habilitado radiadores eléctricos. Al encenderlos la potencia era insuficiente, dando como resultado que trabajadores y usuarios del recinto cultural de la calle Z debían soportar las frías temperaturas de los últimos días. Ahora, como solución, el Concello solicitará a una empresa privada la instalación de un mecanismo abastecido con pélets. Según el Concello no es necesario realizar grandes obras, pues solo habrá que adaptar la caldera para que los radiadores obtengan el poder calorífico de la biomasa. Con este sistema provisional, se estima que el ahorro en energía será de un 40% sobre la tarifa que se estaba abonando en este bajo alquilado. La renovación de la caldera de gas fue desestimada porque en el plazo de dos o tres meses se pretende que la biblioteca esté operativa ya en su nueva ubicación, en la antigua casa consistorial. Analizado por los técnicos municipales el coste de su sustitución, se indicó que el precio de la misma estaría entre los 3.000 y 4.000 euros. Teniendo en cuenta que el traslado de la Varela Jácome está en un horizonte más o menos próximo, el ejecutivo local y los técnicos buscaron una salida alternativa para evitar un coste excesivo e incluso innecesario porque a comienzos del próximo año este servicio se dará en mejores condiciones en el inmueble del viejo consistorio.

Mientras, los afectados aseguraban ayer por la mañana que informaron de este problema a los trabajadores de la biblioteca, que los remitieron al ayuntamiento. Dicen que después su queja fue trasladada al Concello, sin obtener respuesta alguna. En vísperas de exámenes y con las frías temperaturas de las últimas jornadas, estudiar en la biblioteca días como ayer resultaba cuando menos una tarea más que complicada. El problema, para el grupo de gobierno, ya fue atajado.

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