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"Lalín tiene que estar a la cabeza en políticas sociales y agrarias"

-¿Como ve el Concello de Lalín?

-En términos políticos, quedan tres años y medio complicados. Lo fundamental es sumar todas las fuerzas políticas en un pacto por el empleo y ser capaces de situar a Lalín a la cabecera de políticas sociales, de medio ambiente y agroganaderas. No se entiende que, si el potencial dezano es el agroganadero, no exista una industria transformadora. Poner en valor el patrimonio, el medio ambiente, el turismo.

-¿Que medidas propone adoptar con más urgencia?

-No hay medidas estrella. Los presupuestos de 2016 tienen que ir volcados en los servicios sociales, que tienen que estar más que garantizados. No son entendibles gastos faraónicos como el propio concello y que mucha gente esté desprotegida.

-¿Que opina de la compra del Párking Europa?

-Nosotros fuimos muy claros para apoyar la compra: Rebajar sustancialmente el precio acordado en el anterior mandato. Es una hipoteca que los lalinenses tendrán que pagar y un mal menor si pensamos que un fallo judicial en contra podría conllevar una indemnización de seis millones de euros.

-Lalín puede perder los 20.000 habitantes y, por tanto, la categoría. ¿Que se puede hacer para evitarlo?

-Nosotros ya lo advertimos hace años, cuando nadie hablaba de esto, y solo recibimos improperios. Se producen auténticas aberraciones, como el tema de Dozón, que hay que combatir con todas las armas legales que se puedan emplear. Pero estamos convencidos de que en Lalín residen muchos más de esos 20.000. ¿Por que no se censan? Porque igual les sale más caro pagar el vehículo o porque llevan a sus hijos a guarderías de otros concellos. Es un tema muy transversal en el que influyen muchos factores. No se puede hacer discriminación positiva, pero si políticas positivas. Aún así, va a ser difícil.

-La Feira do Cocido, ¿es el emblema de Lalín?

-El emblema de Lalín es Lalín. Ahora bien, lo que funciona hay que mantenerlo, no se puede jugar con algo que genera tanta riqueza. La Feira do Cocido tiene que ser una fiesta más popular, de participación, en la que los protagonistas sean los vecinos, no los políticos.A partir de ahí, dado que tiene un nombre, que nos valga como tarjeta de presentación para vender las potencialidades que nuestro concello tiene.

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