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Donramiro planteará al Obispado que su capilla recupere la catalogación de santuario

La parroquia se apoya en la creación de una cofradía, en 1882, y la agregación del templo al Real Monasterio de Montserrat de Cataluña -En 1886 el obispo de Lugo refrendó la hermandad

Una eucaristía en la capilla de la parroquia lalinense. // Bernabé/Gutier

La parroquia de Donramiro solicitará al Obispado de Lugo la recuperación de la catalogación de la capilla de O Montserrat como santuario. Tras varias investigaciones en las que participaron vecinos; el párroco, Marcos Torres, o el historiador Antonio Vidal Neira se recuperaron documentos relativos a este santuario y a otro episodio histórico: la constitución de una cofradía religiosa en esta parroquia lalinense.

Esta cofradía había sido establecida en la "capilla-santuario" el 5 de septiembre de 1882. Con Laureano Guitián Rubinos como párroco de Donramiro, el sacerdote quiso aprovechar la devoción de muchos fieles y solicitó y obtuvo del abad del Real Monasterio de Montserrat de Cataluña, Miguel Muntadas y Romaní la agregación de la Capilla de Donramiro a la Pontificia y Real Cofradía de Nuestras Señora de Montserrat barcelonesa. Posteriormente, explica Nidal Neira, para que la cofradía arrancase como hermandad se enviaron las cédulas para entregar a sus miembros. Más adelante, el entonces párroco remitió una misiva al obispo de Lugo -en agosto de 1886- para erigir y establecer la Cofradía de Nuestra Señora de Montserrat de Donramiro. Vidal Neira, en sus investigaciones continúa que el 4 de Septiembre de 1886, fray Gregorio María Aguirre y García, Obispo de Lugo y en su nombre el Secretario de Cámara y Gobierno, concedió la erección y el establecimiento de la Cofradía de Nuestra Señora de Montserrat en la Capilla que bajo esta advocación se hallaba fundada en dicha parroquia de Donramiro, toda vez que se había obtenido la competente agregación a la Pontificia y Real Cofradía de Montserrat de Cataluña y vistas las instrucciones para la admisión de los Cofrades, los fines piadosos de la Asociación y su régimen y gobierno, fueron aprobadas por el obispo, para que se guardasen y cumpliesen; además concedió cuarenta días de Indulgencia por la asistencia a cada acto religioso de la Cofradía. La Cofradía quedó registrada en el libro de registro corriente del Obispado de Lugo, en el folio 57. Prosigue Neira que para entrar en la cofradía no era necesario cumplir con requisito alguno, solamente que cada fiel pidiese su adhesión y sí pagar anualmente una cuota establecida en medio real. Formaron parte de la misma, cuando se puso en marcha, 350 personas y según la documentación localizada por Vidal Neira así permaneció hasta 1910. Su punto álgido se vivió cuando la organización alcanzó los 2.500 cofrades y ésta comenzó su ocaso hacia 1960. En estos textos también aparece un dato revelador, pues indica que ya entonces las fiestas de O Montserrat celebraban su día grande el primer domingo siguiente al 8 de septiembre, fechas que se mantienen desde entonces.

El actual párroco de Donramiro confirma que ha solicitado al Obispado de Lugo la recuperación formal del título de santuario para la capilla, que presenta un estado de conservación razonable. La virgen moreneta que cada año por los festejos desde la iglesia de Santa María fue estrenada en 1927, donada por un emigrante de la parroquia en Buenos Aires. Ahora cabe esperar por la respuesta del obispado para la recuperación de este hecho histórico.

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