Los restos mortales del reverendo José Donsión Peña recibieron ayer cristiana sepultura en el Cementerio Municipal de Lalín después de un multitudinario funeral que tuvo lugar en la iglesia de Nosa Señora das Dores de Lalín. Antes, en el tanatorio donde se velaba el cadáver, se vivieron momentos de tensión entre familiares del sacerdote fallecido y el actual rector de O Corpiño, José Criado. Aquellos incluso llegaron a expresar su deseo de que la misa solemne no fuera presidida por el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco, que finalmente no pudo llegar a tiempo de su reciente viaje al Vaticano.
Con una media hora de retraso sobre la hora prevista dio comienzo el funeral por José Donsión, que finalmente fue presidido por el Vicario General de Lugo, Mario Vázquez Carballo, asistido por el párroco de Lalín, Manuel Salgado, el Delegado del Clero de Lugo, Miguel Asorey, el sacerdote Marcos Torres y el arcipreste de Deza, José Pérez Barreiro. Medio centenar de curas de toda la diócesis hicieron acto de presencia durante una eucaristía que llenó el templo lalinense. Durante su homilía, Mario Vázquez, trató el tema de la falta de vocaciones sacerdotales y agradeció el trabajo llevado a cabo por Donsión durante su rectorado en O Corpiño. También tomó la palabra Miguel Asorey para destacar la "sencillez y la cercanía" del malogrado reverendo durante su ministerio. Durante la consagración, el gaiteiro Plácido Rozas interpretó una melodía fúnebre e hizo lo propio durante el posterior entierro tocando el himno del antiguo Reino de Galicia.
Por último, ya se conoce la hora de la celebración eclesiástica que tendrá lugar el próximo domingo en O Corpiño en recuerdo de su antiguo rector. La misa por el alma de José Donsión está prevista para las 12.00 horas, tal y como confirmó ayer su sucesor José Criado.
