Los bajos precios en origen y la falta de relevo generacional al frente de las explotaciones son las causas de que en los dos últimos años, entre 2012 y 2014, hayan echado el cierre 163 explotaciones de vacuno en la zona. La Consellería de Medio Rural acaba de hacer públicos los datos referentes a las explotaciones del registro de ganado bovino, según los que en las dos comarcas en 2014 estaban operativas 3.975 granjas de vacas (2.858 en Deza y 1.117 entre Cerdedo, A Estrada y Forcarei), mientras que en 2012 la cifra era de 4.138.
Pero también hay que señalar que el cese de actividad de granjas de vacuno es más pronunciado en aquellos municipios donde la actividad ganadera no es un pilar fundamental de la economía. A Estrada y Cruces basan su riqueza agraria en otros sectores, la explotación de frutales y el forestal, para ser más exactos. En 2014 A Estrada registra 787 granjas, 46 menos de las que poseía dos años atrás, mientras que Vila de Cruces en el mismo periodo perdió 31 y baja a las 429. Es cierto que A Estrada encabeza en la zona el número de explotaciones de vacuno, pero las granjas con vacas caen a 532 en este municipio.
Es obvio que la crisis permanente que viven los agricultores y ganaderos también dejan mella en los demás municipios, aunque de forma desigual. La cabecera comarcal dezana, Lalín, lidera y de lejos el número de explotaciones de vacuno, con 983 cabezas, pero en dos anualidades han cerrado 20. Silleda es el segundo municipio de Deza por número de granjas vacunas, con 566 dadas de alta, y tras haber perdido 18. Rodeiro, que tiene en el sector primario su principal pilar económico, cuenta con 424 explotaciones de vacuno, y cerró ocho desde 2012. Sus concellos vecinos de Agolada y Dozón tienen un menor peso ganadero, ya sea por el abandono de esta actividad o por su tamaño geográfico. Agolada cede 10 explotaciones y se queda en las 272, mientras que Dozón alcanza las 184 tras perder 13.
En lo que se refiere a Terra de Montes, también se constata una pérdida de explotaciones. Forcarei, con 252, cedió 19 en dos años, mientras Cerdedo, con 78, suma dos. Es el único que crece.
No podemos olvidar que desde abril el mercado lechero funciona sin cuotas. Por eso, en los últimos años las granjas intentaron optimizar su producción metiendo más cabezas de ganado. Por eso, el número de vacas lecheras aumentó desde 2012 en 972 animales, hasta alcanzar los 39.763.
