Los productores de conejo continúan asfixiados por la caída de los precios generalizada que se sitúa por debajo de los costes de producción. Los criadores de la comarca acusan la crisis y reconocen que la situación continúa a ser insostenible para ellos aunque en las últimas semanas se haya producido un ligero repunte del precio.
En todo el año los valores medios del conejo en origen se han situado en torno a 1,49 euros por kilo, muy por debajo de los costes de producción que los productores fijan en torno a 1,80 euros/kilo. En la lonja de Madrid, en el último mes el precio medio rondó 1,60 euros. Un vistazo al precio de esta carne en el resto de países productores evidencia que España se mantiene como uno de los puntos con los valores más bajos. Así, en Italia el precio medio se colocó entre los 2,18 y los 2,22 euros por kilo, con un incremento de 12 céntimos. También en Francia se registró un incremento de 10 céntimos y el kilo del conejo en canal osciló entre los 3,90 euros y los 4,40 euros.
Por su parte, la organización de agricultores y ganaderos UPA y su sección Unións Agrarias, reivindican un decálogo de medidas para salvar al sector cunícula. Entre las reivindicaciones más destacadas reclaman medidas de apoyo financiero, así como la regulación de contratos o la transparencia de las lonjas. Insisten en la necesidad de planes de promoción de la carne de conejo para lograr la recuperación del consumo. En este plano, para los productores es fundamental la apuesta por las carnes diferenciadas y por los mercados de proximidad. Así como evitar la banalización del producto empleándolo como reclamo. También es clave la búsqueda de canales de exportación.
UPA ha denunciado, además, que apenas tres operadores comercializan a día de hoy más del 50% de la producción de modo que dependen totalmente de las ventas de las grandes superficies. Una realidad que motiva prácticas y acuerdos entre sí hacia una competencia a la baja, hundiendo los precios.
El responsable comarcal de Unións Agrarias en Deza, Román Santalla, reivindica, además, la necesidad de plantear un plan de ordenación en Galicia. Aboga por someter a revisión el actual tejido productivo del sector en Galicia. "Es preciso analizar cómo fortalecer el sector". Incluso plantea que se controle la creación de nuevas granjas en aras de reforzar la producción existente y conseguir proporcionarle estabilidad.
Mientras, continúan los contactos tanto con la Consellería así como con el Ministerio para abordar una salida a la crisis que atraviesa el sector. En la jornada de hoy está previsto una reunión técnica en el Ministerio para abordar la situación de los productores.
