El sexagenario vecino de Ribela que resultó herido grave a mediodía del jueves tras sufrir numerosas picaduras de avispas en un monte de Ribela recibió al mediodía de ayer el alta hospitalaria en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS).
Tras permanecer en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) hasta medianoche, en Críticos hasta las 10.00 horas de ayer y en observación hasta el mediodía, recibió el alta hospitalaria si bien continúa medicándose para contrarrestar los efectos del veneno de las innumerables avispas que le picaron el jueves cuando realizaba tareas de desbroce en una finca de monte de Pumares. Le atacaron con tal furia en cabeza y cuerpo que a punto estuvieron de acabar con su vida. La rapidez con la que actuaron su mujer, sus vecinos y los efectivos de emergencia le salvó la vida.
Sufrió el ataque a las 13.00 horas. Se defendió como pudo para desprenderse de las avispas y subió a su tractor para intentar regresar a casa. Pero el veneno surtió su efecto y no logró su objetivo. Se quedó tendido en el suelo, solo, ciego y con una extrema y creciente dificultad para respirar hasta que su esposa se percató de que estaba tardando más de lo debido, fue a buscarle y se lo encontró en pésimas condiciones. Aun pudo contarle que le habían atacado avispas.
Corriendo su mujer alertó a un vecino y este a los efectivos de emergencia. Vinieron el helicóptero, 061, Emerxencias, Guardia Civil y hasta su médico. El personal del helicóptero le aplicó medicación de choque y ello le salvó la vida. Sin ese tratamiento apenas habría resistido 45 minutos. Hoy se felicitan de que todo se haya quedado en un susto y dan las gracias a todo el mundo. Se portaron "extraordinariamente", destacan, agradecidos.
