La Asociación de Veciños de Moneixas insta a la Iglesia que acometa la reparación del cruceiro que el pasado miércoles resultó destrozado por la caída de un castaño durante el temporal. "La Iglesia tiene toda la responsabilidad y como asociación de vecinos le pedimos a sus responsables que lo arreglen con la mayor celeridad", inquirió ayer el portavoz del colectivo, Francisco Vilariño. El presidente de la asociación también recordó que "lo que pasó el martes no es algo que nos sorprenda porque desde que existe la asociación de vecinos se lo venimos pidiendo hace ahora unos diez años".

Francisco Vilariño fue aún más allá en sus acusaciones a los responsables de la iglesia parroquial de Moneixas afirmando que "fueron unos usureros porque les llegaron a decir al Concello usted me corta los árboles y yo les vendo la madera, por lo que intentaron aprovecharse del problema para hacer plusvalía con el asunto". En este sentido, Vilariño también recordó que el propio día del temporal "como ya se sabía que podía pasar, presentaron en el Concello un escrito para que le fueran a talar los árboles", apostillando que el colectivo siempre ha tenido como interlocutor en este tema al sacristán de la parroquia de Moneixas.

Símbolo

El representante de los vecinos de Moneixas también lamentó que lo acontecido provoque que "Moneixas se quede sin un símbolo de la parroquia, no sólo porque data del año 1773 sino por el alto valor sentimental que tiene para los vecinos". Además, aclara que "dentro de lo que cabe, fue una suerte que no pasara hace unos días, cuando los niños jugaban allí durante las fiestas, porque ahora podíamos estar hablando de algo mucho peor". Vilariño concluyó diciendo que "con dinero público se va a tener que arreglar lo que no se quiere solucionar desde la Iglesia".