Lalín puede pasar en los próximos meses de tener un gobierno tripartito en minoría a contar con uno cuatripartito con mayoría absoluta. El actual ejecutivo integrado por CxG, PSOE y APAC mantiene las puertas abiertas a la entrada del BNG, siempre que cumpla las condiciones del pacto ya firmado, y los nacionalistas recuperan a un veterano como Francisco Vilariño para recobrar un protagonismo que no les dio el defenestrado Xosé Manuel López. De momento, nadie mueve ficha, al menos en público. Eso si, al futuro edil nacionalista le faltó tiempo para recordarle al gobierno de Rafael Cuiña su voto decisivo en la investidura: "El BNG fue partícipe activo en el cambio de gobierno", reivindicó Vilariño.

Su segundo aterrizaje en la política local -ya había sido portavoz entre 2003 y 2010- obliga a renunciar a las tres personas que le antecedían en la candidatura electoral: Los exediles José Luis Sucasas y Lupe Novoa y María José Buján. Sus primeras palabras fueron de "reconocimiento público" y "agradecimiento" a Xosé Manuel López -uno de los ausentes en el acto de ayer- por el "enorme trabajo que hizo y lo buen compañero que es, un activo de presente y de futuro".

Por su parte, dijo "asumir con ilusión y responsabilidad", puesto que "así lo quiere la militancia", una representación que, declaró, "en ningún momento pensé que me tocaría". Vilariño anuncia una "nueva etapa" marcada por la "participación y la pluralidad", conservando una dinámica de trabajo "marcada por la organización". "Vamos a votar a favor de lo que entendamos que coincide con el ideario del BNG y con el interés de los vecinos, porque no tenemos más atadura que el interés general".

El portavoz in pectore habla de "proyecto colectivo ilusionante" en "un escenario que nos abre muchísimas posibilidades de trabajo". Pero no aclara si buscará entrar en el gobierno. "No hay nada nuevo desde que se pronunciaron el consello local y la asamblea", sostiene Vilariño, si bien admite "la evidencia de que tenemos más afinidad con este gobierno que con el anterior". Tanto es así que los nacionalistas consideran que "se cumplió el objetivo de desalojar a [José] Crespo". Pero, a partir de ahí, "no hay nada nuevo", reiteró un Vilariño que se atrevió a negar que "en un año o dos podamos entrar en el gobierno", aunque "también puede que acabe el mandato y no entremos".

En definitiva, el veterano político se cuidó de no dar pábulo al runrún existente de que su llegada al Concello supone un cambio de estrategia y un intento de acercamiento al gobierno por parte de un BNG que en los últimos meses se ha visto en tierra de nadie. "La línea política la va a decidir la militancia", reseñó Vilariño, al tiempo que lanzó un aviso a navegantes: "No vamos a participar de la aritmética variable", sino que su voto se regirá en todo momento "por el interés general de los vecinos, sin ningún tipo de compromiso".

Los nacionalistas presentaron ayer un consello local renovado en un 50% y ampliado hasta 23 personas, incluidas ocho no afiliadas, en la Carballeira do Rodo. Su responsable milita desde hace unos días. Manuel Carbón Tallón, de 33 años, licenciado en Pedagogía y técnico de animación y ocio, fue presentado por Vilariño como "dialogante y con mucha capacidad de trabajo, como el nuevo consello". Le arropan los vicerresponsables Fernando Pereira, Laura López y José Luis González, los responsables de área Amado López (organización), Xosé Manuel López (educación), Xosé Luis Cordeiro (medio rural), Adrián Coego (cultura y juventud), Nacho Presas (empleo), Lupe Novoa (mujer), Xoán Carlos Vizoso (movimientos sociales) y Francisco Vilariño (política municipal) y los vocales Alba Suárez, María Jesús Iglesias, Manolo Veiga, María José Buján, Rocío Martínez, Manolo García, Consuelo Iglesias, Ana González, Sonia Pájaro, Xabier Sucasas y Juan Gulías. Están todos los que fueron candidatos a la alcaldía y muchas caras nuevas, en una "unión y mezcla de experiencia y nuevas ideas", significó Carbón. "Tenemos una oportunidad muy buena en este nuevo marco político para hacer algo por Lalín", sentenció el responsable.