Las lluvias registradas en los últimos días han conseguido estabilizar el abastecimiento de agua para Lalín, según informaban técnicos especializados de la empresa concesionaria del servicio. Tras unos meses de alerta ante los niveles del depósito de agua ubicado en Catasós, los valores vuelven a situarse en torno a los manejados otros años en esta época del año. Aunque el caudal del río es aún escaso, el depósito acumula por las mañanas los 4.000 metros cúbicos de su capacidad, lo que permite un suministro sin incidencias. Evita, además, tener que recurrir al bombeo de agua del depósito situado en Botos, a modo de refuerzo como se hizo desde principios de mes. De esta forma, los expertos explican que por el momento el suministro está garantizado aunque está sujeto a las condiciones meteorológicas que se presenten en los próximos meses.