Las Ínsuas de San Ramón de Gres (Vila de Cruces) fueron testigo ayer de la XXIV Xuntanza dos Maiores en la que participaron más de 400 personas. Esta es una fecha marcada en el calendario que los mayores no quieren perderse y acuden año tras año. Los asistentes llegaron en seis autobuses a la celebración alrededor de las 12 de la mañana, procedentes de las distintas zonas de Deza, así como de Vilagarcía, Monfero, Santiago de Compostela, A Coruña, Touro, Boqueixón, e incluso gente de San Sebastián y de Francia, nativa de Vila de Cruces que veranea en el municipio. En la cita también estuvieron presentes miembros de la corporación municipal como el alcalde, Jesús Otero, y la edil de Benestar Social, Beatriz Iglesias Sánchez.

La música, que ya dio sus acordes por la mañana, estuvo amenizada a lo largo de la jornada, por la voz del tenor lírico cruceño Cesáreo Torres y por un equipo musical. Antes de la comida, los asistentes participaron de la misa. La comida que duró varias horas estuvo marcada por momentos de recuerdos y de muchas conversaciones. Los comensales pudieron degustar un menú muy variado a base de empanada, churrasco, carne o caldeiro, rosquillas de la parroquia cruceña de Piloño (que están presentes en cada edición promocionando de esta forma uno de los productos importantes del municipio) y por supuesto, no faltó el pan y las bebidas como agua, vino y café. "La gente tiene muchas ganas de fiesta", comentó la concejala de Benestar Social.

Como ya es tradición, el momento más emotivo de la ceremonia tuvo lugar durante la sobremesa cuando se rindió un homenaje especial al vecino y a la vecina de mayor edad presentes en la celebración. Amelia Mendoza de 92 años fue la mujer de mayor edad del municipio de Monfero y del de Vila de Cruces repitió Sermira Facorro de Larazo con la misma edad. El hombre de más años fue Manuel Cándido Mato de Gres que en octubre cumple los 92. Se les entregó una figura de Sargadelos. "Es la primera vez que la mujer de mayor edad es de fuera del municipio", resaltó Iglesias.

Además, se sortearon una plancha de cocina y la agraciada fue Aurita Carreira y un microondas que le tocó a Teresa Lois, ambas vecinas de Vila de Cruces Asimismo, se les entregó a los más pequeños unas bolsas de golosinas. La fiesta concluyó alrededor de las 19.30 horas.