El abastecimiento de agua en la parroquia estradense de Codeseda ha tenido un buen verano. Los meses de julio y agosto no fueron especialmente secos en estas tierras y las precipitaciones estivales ayudaron a mantener los niveles del depósito de agua, siendo pocas las jornadas en las que el abastecimiento estuvo contra las cuerdas. Sin duda, esto no es lo habitual. Consciente de ello, el Concello de A Estrada ha comenzado a poner en marcha un estudio encaminado a buscar una solución definitiva para una traída de agua habitualmente acosada por la sequía. El primer paso para poner fin a esta situación está siendo el análisis de las fuentes que nutren el manantial y surten este depósito municipal.

El edil estradense de Medio Ambiente, Juan Constenla, confirmó ayer que en estos momentos se están efectuando labores de limpieza en las diferentes fuentes, buscando comprobar cuál es su estado actual y tratando de conocer si el caudal que aportan es suficiente para mantener los niveles del depósito. En esta labor está ayudando diversos vecinos, conocedores de la zona y que se encargan de guiar al personal en la búsqueda de los puntos por los que discurren estos nacientes de agua.

El objetivo es valorar si con una limpieza de la vegetación que crece cerca de estas fuentes sería suficiente para garantizar que llegue un caudal importante al depósito. Constenla señaló que, por tanto, este es un primer paso para valorar dónde pueden originarse los problemas con el abastecimiento de agua de esta parroquia. En todo caso, indicó que la intención del Concello es proporcionar una solución definitiva a esta problemática, buscando corregir las deficiencias que pueda tener esta traída de agua en el caso de que se comprobase que estas no se vinculan al estado de los manantiales.

El edil reconoció que, evidentemente, con las lluvias propias de la estación otoñal la normalidad es la tónica dominante en el abastecimiento. Señaló también que este año no hubo, por las condiciones del verano, graves problemas de agua en Codeseda. Sin embargo, la falta de agua en verano en una constante desde hace ya muchos años, de ahí que se busque, de una vez por todas, darle una salida.

Este año la situación estuvo más o menos controlada hasta mediados de agosto. Cada día el personal el Concello inspecciona los depósitos municipales y el fin de semana del 15 de agosto se recibió el aviso de que comenzaban a detectarse problemas en Codeseda, aun cuando el abastecimiento de agua a los hogares estaba garantizad. Días después la cantidad de agua almacenada continuó descendiendo y se aproximó a niveles preocupantes, por lo que se optó por un abastecimiento externo mediante el uso de camiones cisterna del servicio municipal de Emerxencias. Se realizó un primer rellanado del depósito con 72.000 litros y se normalizó la situación. Aun así, fueron necesarios otros viajes posteriores para mantener los marcadores de nivel dentro de los límites habituales, evitando que cayesen hasta puntos peligrosos.

En este contexto, el de este verano fue un escenario bueno en comparación con estíos anteriores, habida cuenta de que en 2013, por ejemplo, el abastecimiento llegó a ser diario y con varios camiones por jornada.

En otro orden de cosas, Juan Constenla informó de que el Concello se mantiene a la espera de que la empresa Viaqua le remita el informe sobre la última inspección que hizo a la red de alcantarillado en el tramo final de la avenida de Santiago, en la zona de Figueiroa. La empresa realizó hace una semana un vaciado de la red en este punto, una limpieza para luego poder pasar con cámaras y hacer una grabación que permita esclarecer en qué estado se encuentra la infraestructura. A raíz de su informe se propondrán soluciones para los frecuentes desbordamientos.