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La playa de Lalín sigue con marea baja

La propuesta del gobierno de creación de un área de baño en el lago Pontiñas para este verano se ha frustrado »Se supeditó el proyecto a los resultados sanitarios del agua

Vecinos en uno de los márgenes del lago del Pontiñas, al lado del auditorio municipal. // Bernabé/Gutier

Lalín no tendrá, al menos este verano, una playa urbana. Sí existen instalaciones fluviales de baño en Vilatuxe o las de los municipios limítrofes de Sanguiñedo (Dozón), A Carixa (Vila de Cruces) o Cira (Silleda). La propuesta de habilitar una playa en el lago próximo al auditorio municipal fue lanzada por el alcalde, José Crespo, hace exactamente 18 meses.

Entonces el mandatario presentó un proyecto que ya había sido dado a conocer al presidente de Aguas de Galicia, Francisco Menéndez, quien había respaldado la viabilidad de la iniciativa del grupo de gobierno. La construcción de esta playa fluvial urbana estaba supeditada a que el agua cumpliese con las condiciones sanitarias y para ello, en enero del año pasado, se anunció la práctica de analíticas en el cauce fluvial. El objetivo no era otro que los ciudadanos pudiesen disfrutar de estas instalaciones para el verano de este año. Incluso se explicó que, como primera medida, el Concello trasladaría los patos a otro tramo del río Pontiñas para después iniciar los trabajos de vaciado del estanque, limpieza de su lecho y la práctica de analíticas del agua. Pero aquel proyecto, presentado con el convencimiento de que sería atractivo para la ciudadanía, quedó aparcado. De hecho, en los presupuestos en vigor no parece una partida específica concreta para tal fin. Aunque esto no quiere decir que, como otros proyectos, se doten de presupuesto en el momento que exista una oportunidad, habitualmente, de índole económica. Pero no parece el caso.

La actuación en el lago artificial próximo al auditorio consistiría, en líneas generales, en la construcción de una escollera perimetral y el relleno del lecho fluvial con cachotes y grava para rebajar su profundidad -ahora está lleno de lodo y supera los dos metros- hasta los 1,30 o 1,40 metros, como la playa de Vilatuxe. El islote sobre el que se asientan algunos alisos sería eliminado. En este terreno sobre el agua, cuyas dimensiones se redujeron por el efecto de la erosión del agua, permaneció durante años incomprensiblemente una escultura en granito del universal artista e ilustre lalinense Laxeiro, desde hace tiempo, con más criterio, trasladada al exterior del museo municipal.

El alcalde manifestó en una visita al lago, en enero del año pasado, que hacia finales de este verano se podría saber si las aguas del lago son útiles para el baño humano. En caso de serlo, se encargaría el proyecto para la construcción de la playa, que tendría acceso por los dos lados, tanto por la zona del auditorio municipal como por la de las canchas de tenis. Probablemente se construiría la entrada del estanque de agua, un decantador con un depósito para los restos que arrastra el río.

Lago de O Espiño

Justo en el extremo del Paseo do Pontiñas existe otro lago, de menores dimensiones que el del auditorio, donde el Concello también se pretendía actuar. El espacio fluvial lleva años cubierto por la vegetación, pero en este caso lo que podría parecer un inconveniente se ha tornado en la creación de un nuevo hábitat para patos u otros anfibios.

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