El consejo social de coordinación para la cobertura de las necesidades básicas a las familias de Lalín mantuvo ayer su primera reunión de trabajo después de la constituyente, celebrada a mediados de este mes. Representantes del grupo de gobierno, de la asociación benéfica O Mencer y de las oenegés Cruz Roja y Cáritas repasaron algunas de las iniciativas puestas en marcha como el reparto de alimentos a niños de familias sin recursos en los meses de verano, por el cierre de los comedores escolares.

A falta de concretar un balance, esta iniciativa está teniendo una notable demanda entre las familias y "dando una respuesta ágil y eficaz". En la elaboración de los menús colaboran las residencias As Dores y Geriatros y las entregas de comida, que comenzaron este martes, se extenderán hasta el mes de septiembre. En la reunión celebrada anteayer en la casa consistorial se "avanzó en la coordinación, tratando de optimizar y canalizar los recursos solidarios existentes que se disponen actualmente. Por parte del ejecutivo acudieron a la reunión: el alcalde, José Crespo, y las concejalas Paz Pérez (Benestar), Pilar López Carrón (Saúde Pública) y María José Batán (Actividade Económica). También acudieron los representantes de O Mencer Rocío Díaz y José Luis Factor, así como Manuel Salgado (Cártitas) y Silvia Márquez (Cruz Roja).

Los presentes analizaron las primeras medidas de este consejo de coordinación en el que el ayuntamiento, a través de su departamento de Servicios Sociales, cuenta con la colaboración de las tres citadas entidades. Este grupo de trabajo está concebido para canalizar las ayudas a las personas más desfavorecidas y con problemas por exclusión social, "con el ánimo de que los lalinenses más desfavorecidos tengan garantizado unos mínimos vitales en unos momentos complicados; esto es, que no haya ningún lalinense sin techo, sin comida o sin ropa".

El denominado Consello de Coordenación tiene previsto volver a reunirse el último miércoles de cada mes para seguir coordinando las acciones necesarias, en aras de que los vecinos tengan los recursos mínimos garantizados.