Los vecinos que ayer transitaban por Praza da Vila, en Lalín, comprobaron como todo su perímetro estaba cerrado con cintas de plástico que impedían el acceso a este céntrico espacio del casco urbano. Si en días pasados se había delimitado solo el área del parque infantil, ahora es toda la plaza la que está cerrada. Vecinos que desconocían los trabajos en el espacio de juegos infantil mostraron sus quejas por entender que para acometer las reparaciones en el parque no era preciso cortar la entrada a toda la plaza.
Las cintas de seguridad y advertencia se colocaron en todo el tramo de González Taboada, en el paso entre la iglesia parroquial y el parque y también en todos los accesos a Praza da Vila, donde hay portales de viviendas.
