El campo de fútbol de Río se construyó en tres fases y en ninguna de ellas se consiguió que diese las medidas necesarias de 80x25 para que pudiesen jugarse partidos sobre este césped. Eso si, sirvió de lugar de entrenamientos de pretemporada para los equipos de fútbol local, aunque en los últimos tiempos su abandono es tal que su entorno sirve tan solo de pasto para ovejas, caballos y demás ganadería. Incluso algún rebaño se ha colado en los vestuarios, "pero es que ni éstos dan la medida para servir como cuadra", apunta el portavoz del Bloque, Alberto Lamazares.

Su homólogo del PSOE, José Vence, zanja con un "ha sido tirar el dinero" los 300.000 euros de inversión que se ha llevado esta infraestructura, que en principio iba a funcionar como alternativa al campo de A Raña, en Rodeiro, cuando éste estuviese impracticable por la lluvia. Pero claro, el campo era demasiado pequeño y ahora el de A Raña pasará a tener césped artificial gracias a un desembolso de 700.000 euros. El alcalde, Luis López, no era concejal cuando comenzaron las obras del de Río, "pero sí estaba en el gobierno durante las fases posteriores, así que va a convertirse en el hombre del millón de euros en campos de fútbol", reprocha Lamazares. La oposición tampoco olvida que el gobierno popular promovió una pista de pádel, de la que al final acabó desistiendo. "Si se mantuviese la hierba natural en el de A Raña, podría volver a acondicionarse el de Río", zanja Lamazares.