La Diputación provincial pretende impulsar la marca Rías Baixas como sello de calidad turística de toda la provincia, integrando bajo este reclamo tanto a la oferta de costa como la del interior. Se trata de hacerle llegar a los potenciales visitantes la riqueza de las localidades costeras, incluyendo además una variada y adaptada oferta a las necesidades y demandas de cualquier perfil de turista.

Con esta idea trabajarán los 28 becarios que trabajarán durante los próximos meses en otras tantas oficinas de turismo, entre las que figuran las de Lalín y A Estrada. Para hacerle más sencillo su trabajo, ayer dieron comienzo unas jornadas de formación en las que obtendrán las claves necesarias para que la marca Rías Baixas sea vista como un referente en el conjunto de la provincia, según indicó el presidente de la Diputación, Rafael Louzán.

Los asistentes a estas jornadas tendrán la oportunidad, hoy, de formarse en un curso sobre comunicación y excelencia en el trato a los clientes. Mañana se dará a conocer el proyecto Smart Destinos, con el que el organismo provincial posicionará a la provincia en un mercado turístico moderno, en el que la comunicación directa con el cliente y la presencia de internet son fundamentales. Precisamente está abierto el plazo para que las empresas turísticas se sumen al proyecto y entren a formar parte de su plataforma online. Son ya más de un millar las empresas del sector a las que los técnicos de la Diputación realizaron visitas para informarlas personalmente de este proyecto.