Como cada 7 de agosto, los vecinos de la parroquia agoladense de Trabancas celebraron la festividad de San Mamede con una comida. Pero, a diferencia de otros años, el menú campestre tuvo que trasladarse al local social -antiguas viviendas de los maestros- por culpa de la lluvia. El mal tiempo no resto un ápice de diversión a la jornada, que tuvo su nota musical gracias a la actuación del dúo Meritxell.