El presidente de la Diputación, Rafael Louzán, firmó ayer un convenio con los alcaldes de 45 concellos de la provincia mediante el que se compromete a cofinanciar el servicio de teleasistencia para personas mayores y dependientes. Estos casi medio centenar de concellos tienen menos de 20.000 habitantes y, en conjunto, 358 demandantes de dicha prestación. Entre ellos se encuentran todos los municipios de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, salvo Lalín y A Estrada.

El pacto permitirá la atención continuada a 76 usuarios de la zona, después de que el Imserso anunciase a finales del año pasado que no iba a seguir costeando el 65% de esta ayuda y de que la Xunta delegase su aportación económica en las diputaciones. De hecho tanto Rafael Louzán como la diputada Marta Iglesias apuntaron que, al pasar de cinco a solo dos las administraciones implicadas, el esfuerzo económico tendrá que ser mayor. La Diputación pasa de cubrir del 26 al 34% del servicio, con un presupuesto de 163.000 euros, con lo que el 66% restante tiene que ser pagado por los ayuntamientos adheridos al programa y por los propios usuarios. En el expediente de contratación se establece un coste de 19 euros al mes para la persona titular de la prestación, 9,51 para los beneficiarios con la unidad de control remoto adicional, y 7,60 si el usuario no precisa dicha unidad. El coste es similar al de la Deputación de Ourense, 17,58 euros al mes, y que se asignó en abril a la firma Clece.

La empresa adjudicataria se conocerá en los próximos días y ejecutará la atención a partir del 23 de junio y durante dos años. El aporte de la Diputación se calculó en base a los usuarios de teleasistencia domiciliaria registrados a finales de 2012, 1.143 en toda la provincia y, de ellos, 600 en los concellos más pequeños. Louzán insistió en el interés de los municipios por mantener la prestación, "que está permitiendo que muchas personas mayores o dependientes puedan permanecer en sus hogares, con la seguridad que les da saber que, si surge cualquier problema, sea a la hora que sea, van a estar perfectamente atendidos".

El aporte económico de la Diputación supondrá un alivio para municipios como Agolada, que cuenta con 25 usuarios -la mayor cifra de toda la zona entre los concellos más pequeños- y cuya aplicación de plan de ajuste ponía en jaque la continuidad de la teleasistencia solo con la financiación local. Sin salir de Deza, Rodeiro tiene un usuario, mientas que Silleda suma 17 y Vila de Cruces, 10. Dozón carece de demandantes. A los 53 beneficiarios de Deza se suman los 11 de Cerdedo y los 12 de Forcarei.

El perfil más habitual

El perfil más común del beneficiario de la teleasistencia domiciliaria es el de una mujer de edad avanzada, viuda y que vive sola. El servicio se destina, además, a personas que pasan gran parte de la jornada sin compañía o que están en situación de riesgo por edad, enfermedad avanzada o discapacidad. Al estar controladas las 24 horas, se evita que tengan una caída o cualquier incidente y que nadie se entere.