El gobierno lalinense extenderá la zona azul a las calles Alcalde Ferreiro y Pintor Colmeiro de modo experimental durante seis meses, durante los que vecinos y comerciantes podrán evaluar la operatividad del sistema de restricción de estacionamiento gratuito.

Así lo acordaron por amplia mayoría los residentes en estas calles que acudieron a la reunión con representantes del gobierno local. De las cerca de 40 personas que asistieron al encuentro, celebrado en el consistorio, 25 votaron a favor de la zona azul y 9 en contra. Cabe apuntar que algunos de los presentes eran de una misma unidad familiar. El alcalde, José Crespo, abrió la reunión exponiendo a los ciudadanos las ventajas e inconvenientes de este sistema, ya operativo desde hace años en las calles céntricas. Así, señaló que la limitación de aparcamiento gratuito -una hora y media controlada por discos como en el resto de las rúas- favorece la fluidez y movilidad del tráfico, mientras que, como negativo, advirtió de la imposición de multas a los que no respeten la normativa. Aunque la decisión es firme, el gobierno no descarta mantener otras reuniones más adelante.

Una vez que el mandatario, que estuvo acompañado por el edil de Tráfico, Camilo González Bodaño, consideró que existía un posicionamiento vecinal favorable, planteó extender este sistema a Ferreiro y Colmeiro durante un plazo de seis meses. En lo que resta de mes está previsto que comience el pintado de la zona azul, que estaría operativa para junio. Con un margen de casi medio año, el ejecutivo citaría de nuevo a los vecinos y comerciantes para decidir si la restricción de estacionamiento es ya definitiva o se da un paso atrás.

Los presentes en la reunión dieron el visto bueno a la propuesta de Crespo para que, a mediados de diciembre, se establezca otra votación. "Si hubiese una mayoría clara a favor se dejaría y, sino, se realizaría la votación definitiva.

Con la implantación de la zona azul en estas dos nuevas calles son ocho en total las que funcionará este sistema que pretende favorecer la rotación de vehículos. El aparcamiento gratuito restringido a una hora y media en la misma calle fue una demanda, inicialmente, del sector del comercio que, años atrás, apostó por este modelo para favorecer la fluidez del tráfico y evitar que las calles más céntricas estuviesen ocupadas de forma permanente desde primera hora de la mañana por los conductores más madrugadores. Inicialmente se limitó el aparcamiento en las dos principales rúas: Joaquín Loriga y Principal, para luego ampliarse a Pintor Laxeiro, Calvo Garra, González Taboada y D. También se planteó e incluso llegó a aplicarse en la calle Habana, en la urbanización de O Regueiriño -espacio aprovechado para aparcar al haber muchos pisos vacíos-, aunque poco después el gobierno se vio abocado a desecharlo. La franja afectada por la zona azul comprendía un tramo de rúa, justo delante de la casa consistorial.