La concentración de preferentistas el pasado sábado en Silleda, aprovechando la presencia de altos cargos del PP para participar en el congreso provincial del partido, ha provocado reacciones en los diferentes grupos políticos de la zona.

La alcaldesa de Silleda, Paula Fernández Pena, se mostró ayer profundamente crítica con las fuertes medidas de seguridad aplicadas durante las protestas, al entender desmesurada la numerosa presencia de agentes de la Guardia Civil y del cuerpo de antidisturbios, así como de vehículos blindados e incluso helicópteros, que sobrevolaron el recinto ferial durante toda la mañana. "Convirtieron Silleda en un estado de sitio y eso no debería de permitirse en un estado democrático en el que se supone que vivimos", lamenta la regidora.

En su opinión "todo el dispositivo que se montó fue un auténtico despropósito", porque los manifestantes "eran, la mayoría, personas mayores, no terroristas ni nada que se le parezca", sentencia.

Por su parte, Compromiso por Galicia (CxG) también se pronunció ayer sobre el problema de los preferentistas. El partido considera "un auténtico robo" e "injusta" la medida anunciada en relación a la quita -de una media del 43%- que sufrirán los titulares de este tipo de productos.

El responsable provincial de CxG, el lalinense Rafael Cuiña, asegura que se trata de "una de las decisiones más graves tomadas nunca por un ejecutivo en democracia". En este sentido, carga contra el ejecutivo español y la "complicidad y silencio de Feijóo en Galicia" por no defender los intereses de sus ciudadanos y "mirar para otro lado" ante un sector financiero "irresponsable". Defiende que los afectados son "ahorradores, no inversores" e insta a la Xunta y al Estado a solucionar el problema sin que "los engañados sufran quita en sus ahorros", como se anunció el pasado viernes.