La sociedad propietaria del complejo hotelero Torre do Deza de Lalín podría solicitar un concurso de acreedores la próxima semana si no consigue saldar sus deudas bancarias. El gerente del único establecimiento hotelero de cuatro estrellas en la cabecera comarcal dezana, Eduardo Seara, reconocía ayer que está negociando con varios socios mejicanos para que no retiren sus apoyos a la entidad y poder solventar la situación. "El preacuerdo que teníamos no se cumplió y ahora tenemos que renegociar la propuesta del banco con el pago a proveedores", señala el gerente del hotel ubicado en Bergazos.

De todas formas, Eduardo Seara se muestra optimista sobre el futuro del hotel porque considera que se trata de pasivo "manejable" y con margen para poder llegar a un acuerdo ante del próximo miércoles, aunque tampoco se descarta que podría contar hasta el jueves para llegar a un acuerdo provisional con la entidad financiera. "Esperamos que esto no sea nada más que un bache debido a los tiempos que corren", sentencia el gerente del Hotel que, sin embargo, asume la posibilidad del concurso de acreedores como última opción para solucionar los problemas financieros del complejo hotelero lalinense. Seara también desvela que a los 26 empleados -inicialmente trabajaban 35 personas en el hotel- que en la actualidad tiene el hotel se le debe la nómina del pasado mes de febrero.

Tal y como adelantó FARO DE VIGO, la sociedad que rige el Hotel Torre do Deza solicitó en diciembre de 2012 un preconcurso de proveedores con el fin de poder saldar deudas con varios proveedores, entre los que se encontraba la constructora Framiñán, encargada de la realización del establecimiento situado en el parque empresarial Lalín 2000. La gerencia del complejo confirmó entonces a esta Redacción la existencia del proceso en curso y, además, descartaba que su puesta en marcha supusiera reducción de plantilla alguna entre sus empleados. El plazo del preconcurso finalizó el pasado mes de enero, a la espera de la llegada de una ayuda procedente de la Xunta. Los principales accionistas del hotel esperaban que la subvención procedente del gobierno regional pudiera llegar a tiempo antes de que finalice el proceso preconcursal y, así, evitar la recapitalización obligada para poder hacer frente a los impagos contraídos desde la finalización del complejo hotelero de Bergazos, algo que parece no ha sucedido.

Cierre temporal en Silleda

El Hotel Katiuska de Silleda es el otro establecimiento de cuatro estrellas de la comarca y también tiene problemas, pues está cerrado sine die desde comienzos de año. La cadena Oca Hotels, que lo tenía alquilado hasta junio de 2015, ha abandonado precipitadamente la plaza por lo que considera "incumplimientos" por parte de la propiedad. Desde esta sociedad, por su parte, se habla de impagos por parte de la concesionaria y de haber dejado las instalaciones en pésimo estado. De hecho, los dueños ya realizaron tareas de limpieza y acondicionamiento en el exterior del mismo para evitar que se agudizase su deterioro.