Nunca la sombra de la azuela de Barradaos, lugar de la parroquia silledense Saídres fue tan alargada. Aún sin conocerse su paradero, ya ausente del lugar en el que supuestamente fue hallada, sigue provocando una importante afección en la zona. Tanta, que ninguno de los propietarios de las cinco casas del lugar puede realizar ningún tipo de construcción. Se lo impide el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), contra el que alegarán.

La documentación urbanística establece una zona de protección arqueológica en dicho núcleo, porque allí, concretamente en el Agro de Nogueira, apareció "una azuela de piedra pulida de color verde grisáceo de ocho centímetros de largo por tres centímetros y medio de ancho máximo, y 1,3 centímetros de grosor". El Plan establece que en esa área está prohibida cualquier tipo de construcción, porque afectaría a dicho yacimiento. Un hallazgo que, por otra parte, los vecinos desconocen en qué año se realizó, e incluso ignoran el paradero de dicha piedra, retirada en su día de la finca.

Se sospecha que la azuela se encuentra depositada en el Museo de Pontevedra, pero los vecinos aseguran que sus responsables no han podido confirmar que, exactamente, esa pieza esté guardada en sus dependencias. "No le consta ninguna por esa descripción", apunta uno de los afectados. Sea como fuere, lo cierto es que la zona está afectada por un yacimiento que, según los vecinos, ya no se encuentra en el lugar, pero sigue dando dolores de cabeza a quienes quieren hacer rehabilitaciones en sus viviendas, garajes o cobertizos, y no pueden, porque infringirían las nuevas directrices urbanísticas. Hay proyectos de rehabilitación parados por no poder acometerse obras.

Los afectados presentarán alegaciones al PXOM -el plazo remata el próximo domingo, día 17- para pedir que se revise la afección. Cada vecino entregará un escrito explicando su caso particular, pero "alegando todos en conjunto", apuntaba ayer uno de ellos. Buscan así que se atienda su caso, y piden que alguien les explique cuándo apareció la azuela y, por qué sigue protegiéndose cuando, supuestamente, no se encuentra físicamente en el lugar. Aseguran que los técnicos del Concello de Silleda incluso le recomendaron poner el caso en manos de un abogado, dadas las reticencias de Patrimonio a ceder ante este tipo de asuntos.

"Se me entierran los coches y no puedo ni drenar, porque no me dejan hacer ninguna obra", apunta uno de los vecinos. Estos se preguntan, también, por qué el núcleo de Carracido consta como zona desprotegida alrededor de las viviendas, a pesar de que hay también restos encontrados.

Dicen no estar en contra de esta catalogación, por eso denuncian que "el criterio que sigue Patrimonio no tiene pies ni cabeza", concluyen.