El Concello de Vila de Cruces ha establecido ya las tarifas para acceder al Museo da Minería de Fontao, pendiente de ser abierto al público. El precio de la entrada ordinaria es de tres euros por persona. Los pensionistas, los estudiantes, o aquellas personas que realicen la visita a las instalaciones en grupo abonarán 2,50 euros, mientras que los turistas que padezcan algún tipo de discapacidad, tanto física como psíquica, únicamente abonarán 1,50 euros.

El gobierno local ultima la redacción de la ordenanza de funcionamiento del museo para ser aprobada, casi con toda probabilidad, en el pleno ordinario del próximo des de marzo, según previsiones del alcalde, Jesús Otero.

La intención del ejecutivo es abrir definitivamente las instalaciones al público en torno al mes de mayo. El Concello había barajado la posibilidad de que el museo fuese atendido por el propio personal municipal, aunque esta opción es inviable dada la carga de trabajo que soportan ya los operarios de la administración local. En este aspecto, los promotores de las instalaciones cuentan con el apoyo de la Diputación de Pontevedra, que enviará un técnico de turismo para que realice las funciones de guía durante los primeros meses de apertura. Será una persona que acabe de rematar sus estudios, y que deberá someterse a un proceso de formación en lo que a temática minera se refiere y, especialmente, a las particularidades del complejo de Fontao.

Visita de una hora y media

El gobierno todavía no ha establecido el horario de apertura del espacio expositivo, aunque la idea es que el museo, esté accesible todos los días de la semana, excepto uno. Este es un aspecto que el ejecutivo tendrá que definir en función del personal del que disponga, y del número y tipología de visitas que reciban las instalaciones.

El contenido del museo está ya listo. El hall del edificio del antiguo cine cuenta con una exposición dedicada a la arquitectura del poblado, con planos del proyecto inicial. La estancia de la capilla alberga una gran maqueta del complejo y está dedicada a la historia de Fontao. En sus vitrinas se guardan más de 300 piezas del legado de Hilgen, cedidas por el Concello de Lalín. Mientras, las escuelas se dedicarán a exposiciones itinerantes. La intención es que el visitante recorra las instalaciones y conozca la historia minera de la zona en una hora y media.