Vecinos de la parroquia estradense de Moreira decidieron realizar por cuenta propia análisis de las muestras de tierra y agua facilitadas tras la inspección realizada en la zona por técnicos de Xunta. Este personal se desplazó hasta la parroquia estradense a última hora de la mañana del viernes, después de que en la noche del jueves se diese la voz de alarma ante la atención médica que precisaron al menos cuatro habitantes de la zona y que se achacó a la exposición –vía aérea– del abono empleado en tres fincas. Según se explicó, el compuesto –formado por lodos de depuradoras y subproductos animales–, pudo haber fermentando, ayudado por las altas temperaturas de los últimos días, tras haber estado varias semanas acumulado en las fincas sin ser incorporado a la tierra.

El abogado Nicolás Andión explicó ayer que los vecinos decidieron esperar a conocer los resultados de los análisis practicados por los técnicos de las administraciones competentes, toda vez que realizarán los suyos propios gracias a las muestras que les fueron facilitadas. Apuntó que los habitantes de este entorno tienen previsto mantener una reunión en el transcurso de la próxima semana para decidir qué medidas tomarán.

Además, los vecinos tienen a las 11.00 horas de mañana una cita con técnicos de Sanidade para analizar los manantiales de agua de la zona y comprobar si se vieron afectados por este abono. Con toda la cautela, reconocen que resulta "indiscutible que hubo contaminación aérea" pero se decantan por aguardar a ver si este producto se pudo haber filtrado. Los vecinos explicaron también que estos análisis se irán realizando en el agua a lo largo de un año.

Por otro lado, algunos vecinos aseguraron ayer haber denunciado que se continuó labrando una finca cuando –siempre según su versión– se debía haber detenido esta labor en uno de los predios.