Crisis y corrupción protagonizaron ayer el Entroido tradicional de A Estrada. Quien esperaba incisivas coplas sobre el cambio de gobierno local se quedó con las ganas. El único asunto local que se asomó a las coplas del "atranque" de los Xenerais de Couso y San Xurxo de Vea fue el retraso de más de 20 años que acumula la parcelaria de Couso, que ya es "obra legendaria".Previamente, los Xenerais habían sacado a colación el paro, coplas "picantes", los recortes en sanitarios, las cuentas de la Familia Real, las de Urdangarín y la "bronca" que "le echó" su "suegto" y la boda de la duquesa de Alba, con tintes jocosos.

Triunfaban así los asuntos que ya habían inspirado a las parroquias de Couso, San Xurxo de Vea, Ribeira, Guimarei, Moreira, Arnois, San Miguel de Castro, Lagartóns, Loimil, Cora, Matalobos, Oca, Berres, Callobre y Santeles para las comparsas que animaron las calles junto a los bailarines de Sondodance.También asuntos del corazón como el romance de Shakira y Piqué inspiraron los disfraces que se sumaron al Entroido, en el que abundaron viejos y labradores, como ocurrió en el baile de disfraces con concurso de Santa Apolonia de Guimarei, el lunes. Concluía así un Entroido cuya voz se oyó en el exterior mediante el programa de radio que emitió en directo la SER desde la alameda.