Técnicos de la Consellería de Medio Ambiente se personaron esta semana en el área recreativa de A Carixa con la intención de suspender los trabajos de mejora en el cauce del río y la piscina anexa, ocasionados por el temporal del pasado mes de enero. Casualmente, esta intervención, solicitada a la Xunta por el gobierno cruceño, está siendo ejecutada por el organismo Augas de Galicia y cuenta con permiso de este departamento pero no de la delegación territorial de la consellería que dirige Agustín Hernández.

El alcalde cruceño, Jesús Otero, indica que la actuación no será suspendida puesto que cuenta con la correspondiente autorización de Aguas de Galicia, y entiende que los dos departamentos autonómicos deberían conocer que la intervención está avalada por la propia consellería. En todo caso, los técnicos de Medio Ambiente instaron al gobierno local a tramitar ante la delegación provincial un permiso "de trámite" para proseguir los trabajos. "É una obra que está sendo executada por Augas de Galicia a petición do concello, e conta con dous informes favorables, polo que nos parece estrano que haxa que dispoñer tamén doutro permiso de Medio Ambiente", afirma el regidor.

Otero dice que los representantes de la consellería le aconsejaron que reclamase esta autorización y entiende que los trabajos no serán suspendidos puesto que están siendo acometidos por la propia administración autonómica. Y apunta que a principios de la próxima semana realizarán las gestiones para garantizar que las obras se llevan a cabo con arreglo a la normativa vigente.

La intervención, que se realiza con maquinaria pesada, está causando un fuerte impacto medioambiental en el río, puesto que incluso se varió su cauce y numerosos pescadores de la zona lamentaron que fuese la propia administración gallega la que optase por una actuación tan agresiva. Sin embargo, el alcalde asegura que es necesaria la intervención de una excavadora para levantar el terreno y colocar las rocas de gran tamaño que, a consecuencia del temporal, se habían depositado en varias zonas del río. El proyecto tiene un presupuesto aproximado de unos 30.000 euros y fue uno de los tramitados por la Xunta con carácter de urgencia, dentro de los daños del temporal. La actuación comprende, además de la retirada de las piedras de gran tamaño del río, la reconstrucción del muro anexo a la piscina, que resultó notablemente afectado por la crecida del río y que está prácticamente destrozado. "A recomposición do muro era moi necesaria porque, en calquera momento, podía caer todo ao río", significa el mandatario cruceño.

En todo caso, vecinos y pescadores cuestionan esta actuación y sostienen que deberían emplearse otros métodos menos agresivos con el medio natural. El BNG local anunció ayer que se interesará en el concello por las características del proyecto.