Acompañados por el Obispo, Monseñor Alfonso Carrasco Rouco, varios delegados de la Diócesis de Lugo y hasta una veintena de párrocos, unos 500 jóvenes peregrinarán, el próximo sábado, al santuario del Monte Faro. La peregrinación juvenil que organizó la Diócesis hasta 1999 y que, tras una década de suspensión, se recuperó el año pasado, cuenta de nuevo con un amplio respaldo social, pues en ella participan jóvenes con más de 13 años llegados de todas partes de Lugo y de la comarca dezana.

La romería, además de revivir las peregrinaciones a los santuarios marianos y de transmitir su significado a los creyentes más jóvenes, significa también un nexo de unión entre los pueblos –el santuario do Faro se enmarca casi en la zona donde confluyen las cuatro provincias– y la puesta en práctica de valores como la caridad, el altruismo o la propia fe. Aunque la peregrinación comienza en la explanada de la carretera entre Rodeiro y Chantada, este tramo de ascenso al santuario de la cumbre sirve a los jóvenes para reflexionar acerca de estas cuestiones. Para muchos, seguro que esta ascensión al Faro supone un complemento a la peregrinación a Santiago que organiza dicha diócesis y que comenzó el pasado 24 de abril en O Cebreiro y cuyas siguientes fases serán el 26 de junio y el 18 de septiembre.

Concierto

En cualquier caso, tras la subida al santuario con la lectura de diversos pasajes bíblicos como "banda sonora" del camino, el medio millar de jóvenes participará en una liturgia oficiada por el propio Obispo para, a su término, disfrutar de una comida de confraternización amenizada con diversas actividades y un concierto a cargo del valenciano Gabi, que tendrá lugar a lo largo de la tarde.