La empresa valenciana Husesolar pretende poner en marcha en 18 meses su planta de biogás en la parroquia silledense de Escuadro. Así se lo hicieron saber directivos de la sociedad a la gerencia de la cooperativa ganadera Indega durante una reunión mantenida en la noche del miércoles, donde la entidad explicó una parte de su plan, en el que colectivo ganadero sería el responsable de coordinar la entrega a la planta de la materia prima para la producción de energía eléctrica.

El presidente de Indega, Paulino González, afirmó que en esta reunión se expuso parte del proyecto empresarial que pretende radicarse en el lugar de Cascaxide y que ya había sido trasladado por la sociedad valenciana a la anterior junta rectora de la cooperativa. Husesolar también mantiene, por otro lado, negociaciones con varios vecinos para la consecución del suelo necesario para asentar su planta de biogás y a estas alturas ya han valorado dos fincas de Cascaxide. No obstante, González entiende que, por el momento, no existe un acuerdo definitivo. En caso de prosperar la iniciativa empresarial, Indega tendría que asumir "a loxística" para trasladar desde las explotaciones a la planta productos como abonos o purines para su regeneración y conversión en energía.

Además, la empresa tiene abierta otra negociación con Hidroeléctrica de Silleda, con la intención de que la compañía local sea la encargada de la evacuación y comercialización de la energía eléctrica que se genere en la factoría de Cascaxide.

La puesta en marcha de la planta dentro de los plazos previstos dependerá en buena parte de los plazos que maneje la empresa para la consecución de las preceptivas licencias, una vez que la construcción de las instalaciones no se demoraría demasiado. La firma Husesolar cuenta ya con un proyecto similar en el municipio lucense de Guntín.