La alcaldesa de Silleda, Paula Fernández Pena, confirmó ayer que presentará una querella contra el portavoz del PP, José Fernández Viéitez, por culparla del intento de compra del edil socialista Gerardo Lázara, ofreciéndole un puesto de trabajo en una firma concesionaria de obras municipales. La demanda seguirá su curso dado que el ex alcalde no acudió ayer al Juzgado de Paz silledense, donde tenía previsto celebrarse un acto de conciliación por estos hechos. "Seguiremos adiante coa denuncia, unha vez que o portavoz do PP nin sequera se presentou na conciliación. Agora debería dar unha explicación aos silledenses de por qué calumniar e difamar é a súa afección favorita", dijo la mandataria.
Viéitez indicó que no acudió a la conciliación debido a que no tenía previsto rectificar sus afirmaciones. "Con todos os respectos para este acto, se a alcaldesa mantén a súa postura e eu a miña, é un acto que sobra. Non teño inconvinte en acudir a un xulgado", señaló el ex alcalde, quien expuso también que obvió la conciliación "para que o goberno non use estas cousas con fins mediáticos e partidistas". Subrayó que no corregirá sus palabras, puesto que "o propio implicado recoñeceu os feitos e por parte da mesma alcaldesa se admite que intentou buscarlle un emprego", dice. Sobre la vinculación de la firma con la que Pena habría negociado la incorporación de Lázara, el ex alcalde reitera que se solicitó un crédito para realizar un pago a la misma, aunque cabe recordar que la alcaldesa recurrió a una operación de tesorería para afrontar un abono que había sido ordenado judicialmente.
Pero la judicialización de la vida política trasdezana no se detendrá con este proceso. La regidora anunció ayer que estudiará con la dirección de su partido presentar otra demanda contra Viéitez por vincularla con los actos vandálicos de los últimos días, como las pintadas aparecidas en los padres de la edil no adscrita Ofelia Rey y en una pista próxima al domicilio del concejal Gerardo Lázara. "Estou moi cansa de que se me achaque a miña participación no tema das pintadas ou no reparto de folletos", dijo, y declaró que "os que xeran a crispación son os que insultan en desprestixian pero non acuden aos xulgados".
Apretada agenda
La mandataria volvió a reclamar a los promotores de la censura que explicasen públicamente los motivos por los que pretenden forzar un cambio de gobierno y lamentó que los ediles del PP todavía no tramitasen su baja en la administración local como concejales de este partido. "Tampouco vou tolerar que se me siga colocando o estigma de que estamos aferrados ao posto. As nosas vidas laborais xa existían e a algún, íanos mellor", ironizó. "Se nos din os motivos da censura e nos convencen iremos para a casa, e non pediremos unha baixa médica", dijo, en alusión a Viéitez.
Pena mantendrá estos días su agenda de actos y hoy explicará sus gestiones con Espina y Delfín para rebajar el precio del agua.
