El recinto Feira Internacional de Galicia, en Silleda, vivió ayer otra multitudinaria jornada de oposiciones para plazas en la administración autonómica, que citaron en la Semana Verde a casi 3.000 aspirantes a puestos de auxiliar administrativo. Pero la principal novedad de ayer fue la instalación de una decena de tiendas en los locales del pasillo central de la asociación de comerciantes silledenses, que despertó la curiosidad de los opositores y parte de sus acompañantes. La asociación de comerciantes Ecos pretende conseguir con esta propuesta que los millares de visitantes que pasarán por la feria durante este y el próximo mes puedan realizar algunas compras en sus establecimientos y ofrecer al público un servicio del que carecía el recinto y que representa una buena oportunidad de negocio para los distintos sectores del comercio local.

Las pruebas arrancaron a las 10.00 horas pero ya minutos antes el aparcamiento del recinto estaba repleto de coches y los opositores ascendían por las escaleras que dan acceso a los pabellones donde se realizan las pruebas. Justo enfrente se ubicaban las tiendas de Ecos, que completaron la jornada con un balance positivo de ventas. Sin embargo, algunos comerciantes lamentaban que no pudiesen publicitar su iniciativa lo suficiente o que el acuerdo con la Semana Verde fuese tan tarde que no le diese tiempo a presentar unos locales más atractivos para la clientela. Fátima Costoya, presidenta de Ecos, calificó esta iniciativa como muy positiva y destacó el elevado nivel de satisfacción de los comerciantes que instalaron sus tiendas en la feria. "Os socios están contentos", señaló, pese a admitir que era el primer día y el público todavía no conocía que dispondría de estos establecimientos para realizar sus compras. Textil y calzado son los sectores con más presencia entre el comercio, aunque existen tiendas de complementos o quioscos, que atendieron a un respetable número de clientes.

Anécdotas

La jornada se desarrolló sin incidencias y los casi tres millares de aspirantes a las plazas del grupo C2 accedieron por orden de llamada a los pabellones. Entre los aspirantes había cuatro mujeres embarazadas, que realizaron los exámenes con normalidad, igualmente que una persona sordomuda, que no había reclamado una atención especial, pero que fue informado por uno de los supervisores. Otra mujer padeció la picadura de una avispa, pero pudo completar las pruebas sin ningún problema.