La alcaldesa de Silleda, Paula Fernández Pena, mantuvo ayer por la tarde una reunión con la Policía Local y con representantes sindicales de los trabajadores del Concello para cerrar el convenio colectivo. Al encuentro con la Policía Local acudieron tres de los siete funcionarios. Como estaba previsto, se les presentaron tres propuestas con características diferentes. Los tres funcionarios estuvieron de acuerdo con una de las propuestas presentadas, que incluye la adecuación a la nueva ley. Con esta adaptación, los agentes cambian de categoría, ascendiendo al grupo C1. La ley determinaba que el cambio debía producirse antes del primer trimestre de 2010, sin que se tuviera que producir un aumento salarial, ya que se posibilitaba la opción de incrementar el salario base reduciendo en la misma cuantía el complemento específico, de forma que el salario de los agentes quedaba igual.
La propuesta del gobierno local fue un incremento de 19.000 euros en el salario base, correspondiente al cambio de grupo, sin reducción del complemento específico. Unos gastos asumibles por el concello utilizando el capital del capítulo de personal y el de productividad. Si los funcionarios aceptaran esta propuesta del gobierno local, deberían renunciar al plus de peligrosidad, nocturnidad y turnicidad.
Los tres policías presentes en la reunión acordaron trasladar la propuesta al resto de sus compañeros y responder al gobierno local, aunque mostraron una clara posición de aceptación de la propuesta. Entienden que la iniciativa aprobada en el pleno del jueves puede ser motivo de impugnación por el resto de los trabajadores municipales, lo que retrasaría cualquier posible acuerdo.
La alcaldesa declaró que la propuesta aprobada en el pleno, a iniciativa del PP, es “ilegal”, ya que no se puede llevar a cabo una subida del salario a los funcionarios por encima del 2% anual que marca la ley. La regidora también apunta que es un gasto inasumible por parte del concello, ya que la propuesta del Partido Popular pide un incremento del 25% solamente a siete funcionarios, dejando al resto de los empleados (55) en una situación de indefensión económica. Supondría un incremento anual de 48.500 euros.
La regidora reiteró que las modificaciones de horarios de la policía se deben a su regularización, ya que los funcionarios hacían 70 horas al año menos de las que le correspondían. Tenían que cubrir 1.589 y hacían 1.519; y recibían un plus de productividad fijo y periódico, “algo totalmente irregular”. Tras regularizar la situación, ahora los agentes trabajan dos semanas 25 horas y la tercera, 37,5, empleando las horas que les restan en servicios nocturnos, 15 al año, y en refuerzos en las fiestas de Silleda y A Bandeira.
Convenio colectivo
En la reunión de ayer, entre la alcaldesa y los representantes sindicales, se cerraron los últimos puntos que faltaban por negociar en el convenio colectivo. Los representantes trasladarán las decisiones al resto de trabajadores, y en caso de estar todos de acuerdo, la próxima semana se harán públicas las condiciones y términos del acuerdo.
