El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha solicitado autorización al Concello de Silleda para ejecutar de inmediato las medidas compensatorias por los daños del TAV en el municipio. La intención del administrador es aminorar las afecciones que la estructura ferroviaria causa en el sistema fluvial Ulla-Deza.

Por ello, está previsto una actuación de gran calado en la ruta del Deza entre Carboeiro y Pazos, que se acondicionará, contará con una profunda limpieza y tendrá una fuente y un biotopo para pequeños anfibios.

Esta primera actuación, sobre el sendero en el monasterio y la Fervenza do Toxa, comenzará con una limpieza parcial de biomasa para disminuir el riesgo de incendio creándose una franja de unos cinco metros a ambos lados del camino.

El proyecto también incluye la retirada de árboles caídos, la restauración de la señalización y la instalación de información a lo largo de la ruta. Así, se colocarán nuevos carteles en el entorno de la playa de A Carixa o en el acceso a la Fervenza. También se repintará la estructura metálica de la pasarela del río Deza, que pasará a ser verde.

Las actuaciones también abarcarán la reparación y ampliación del vallado existente, ya que algunos postes son inestables. Por ello, se trabajarán en su cimentación y se alargará esta infraestructura unos 60 metros.

Según explicó la alcaldesa silledense, Paula Fernández Pena, los trabajos del Adif se completarán con una limpieza de especies exóticas en los márgenes de los ríos afectados por el TAV con el fin de llevar adelante una restauración vegetal de la flora autóctona. Finalmente, también se contempla construir una fuente y un biotipo para anfibios cerca del pilar 5 del viaducto del Toxa.