El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ignora las demandas de vecinos y Concello de Lalín para reparar los daños ocasionados por las obras de construcción de la línea férrea del Tren de Alta Velocidad (TAV). El concejal de Infraestructuras y Servicios Rurales, Antonio Rodríguez, critica que el organismo estatal mantenga "nunha situación terceiromundista" las pistas rurales que utiliza para el paso de camiones y maquinaria pesada de los trabajos en los distintos tramos que atraviesan el municipio. A su juicio, la actitud del Adif pone de manifiesto un "pasotismo total" respecto a las reiteradas demandas formuladas desde el concello, que serán reiteradas una vez más la próxima semana mediante un acuerdo de la junta de gobierno.

El concejal presentará una propuesta de acuerdo en la próxima reunión del órgano gubernamental, prevista para el martes, para reiterar al Adif la necesidad de mantener en buen estado de conservación las pistas rurales que utiliza para el tráfico de camiones de las obras. La situación es "especialmente lamentable" en el caso de las parroquias de Vilanova, A Xesta, Botos, Donsión, Bendoiro, Madriñán y Anzo. Los viales de estas localidades "non están preparados para soportar o elevado peso da maquinaria que se utiliza nin a intensidade do tráfico de vehículos pesados cara o trazado do TAV", dice Rodríguez.

El concejal asegura que el concello continuará "demandando as veces que faga falta" a los responsables del Adif el arreglo de las pistas afectadas en el rural. "Aínda que somos conscentes de que a resposta será nula, como veu acontecendo noutras ocasións", lamenta Antonio Rodríguez.

Por otro lado, el Adif ha respondido al requerimiento remitido tiempo atrás por el Concello de Lalín en relación con las quejas de los vecinos de Bendoiro por las detonaciones efectuadas en el túnel de O Castro, que también fueron denunciadas a esta Redacción por sus posibles afecciones al yacimiento arqueológico de la zona. El organismo ferroviario estatal se limita, no obstante, a contestar que las voladuras "se realizan según la legislación vigente" y siguiendo lo definido en el proyecto autorizado por la autoridad competente tanto en su ejecución como en el control de los distintos parámetros, como pueden ser las vibraciones. Según la información facilitada por el ayuntamiento, la carta del Adif no especifica nada sobre los daños a los dos castros, uno de ellos situado justo encima del túnel artificial que se está perforando y del que proceden las explosiones objeto de las quejas vecinales.

A pesar de esta notificación, advierte Rodríguez, "continuaremos vixiantes e apoiaremos aos veciños para que estas obras non supoñan prexuízos máis alá do que se pode considerar razoable e admisible nunhas obras destas características". El concello mantendrá el contacto con los vecinos para comprobar que las voladuras se realicen dentro de la normativa y no provoquen daños. En este sentido, el ayuntamiento se compromete a "estar a disposición dos veciños" para atender sus quejas e intentar "minimizar as molestias" de las obras.