El Concello de Lalín admite la situación de fuerte crisis que está padeciendo el sector de la construcción. El reconocimiento es cada vez más abierto, como expresó por última vez el edil de Urbanismo, Román Rodríguez, hace dos semanas en la presentación del SUE-3 o plan parcial de la Avenida Xosé Cuiña.

"Non me doen prendas en recoñecer a crise da construcción, pero nós temos que seguir traballando para que haxa solares listos á venda cando pase este momento complexo", significó el concejal, que ya trabaja con la vista puesta para dentro de 2 ó 3 años, época en la que confía que haya una buena dinámica económica.

Con esta estrategia, el Departamento de Urbanismo del Concello de Lalín está activando, con mayores o menores avances, hasta un total de siete proyectos de desarrollo urbanístico que cuentan con capacidad para albergar hasta 1.826 viviendas. De este modo, se cree que los constructores estarán servidos para cuando se supere la crisis.

El más ambicioso de todos es el SUE-3 o plan parcial de la Avenida Xosé Cuiña, que permitirá edificar hasta 671 hogares a lo largo de esta calle hasta el Alto de Vales. El proyecto acaba de ser aprobado inicialmente y el concello confía en que todo el proceso administrativo y las obras de urbanización estarán rematados a mediados del año 2012.

Otra importante bolsa de suelo radica en el Agro de Lalín de Arriba, donde se podrán construir hasta 285 pisos y casas. Este plan de sectorización es el proyecto más avanzado de todos, ya que se espera que los trabajos finalicen a lo largo de este verano.

También supera el listón de las 200 viviendas y se encuentra próxima a su finalización el área de reparto (AR) 29, que se contaba con finalizar hace casi tres años, pero que se ha visto demorada por diversos problemas. En una zona anexa, pero del otro lado de la estación de autobuses, se encuentra el AR-30, también prácticamente rematada y con potencial para 172 hogares.

Un poco más retrasados, y con al menos un par de años de tramitación y obras por delante, están el plan Canteiras do Areal-Monte Batán y el proyecto de la Finca Zarra de Ventureira. El primero, que tiene capacidad para hasta 166 viviendas, ha sido eximido del estudio ambiental y el segundo, que se localiza cerca de la carballeira de O Rodo y podrá albergar 134 hogares, ha superado las exigencias de Medio Ambiente con éxito.

Finalmente, también está en los albores el plan parcial de O Regueiriño Norte, que es susceptible de contar con 193 viviendas en las inmediaciones del paseo del Pontiñas. Con este proyecto, denominado como SUE-2, se completarían los cuatro SUE con los que cuenta el Plan Xeral de Lalín. La urbanización de O Regueiriño está rematada, el plan de la Viuda o de la Carretera de Lugo se encuentra cercano a la finalización y ya tiene edificios levantados y finalmente el plan de la Avenida Xosé Cuiña aún está arrancando, pero la iniciativa parece imparable.

A mayores de estos siete proyectos con capacidad para más de 1.800 viviendas, el concello también juega con otras posibilidades, algunas de las cuales ya están en manos privadas para sud desarrollo. Así, habrá bolsas de viviendas en el solar del viejo colegio Manuel Rivero, en las ocho zonas que se prevén reurbanizar en la periferia del casco urbano y, ya a medio plazo, a lo largo de toda la ronda este.