Los representantes sindicales y los de la constructora Proinsa, inmersa en un proceso concursal de acreedores, no alcanzaron un acuerdo en la jornada de ayer para fijar las indemnizaciones de los 240 trabajadores por medio de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en vez de hacerlo a través de despidos improcedentes, aunque se concedieron un plazo de 48 horas para desatascar la situación. El pacto tiene que llegar antes del viernes, ya que es la fecha prevista para los juicios sociales, que quedarían anulados de producirse el acuerdo.

En principio, el Fondo de Garantía Social (Fogasa), que estuvo representado en el encuentro por medio de Miguel Estévez, está dispuesto a asumir el 66% de las indemnizaciones. Así, abonará a cada empleado 20 días por año trabajado.

Por ello, el acuerdo depende de que los 10 restantes que culminarían con los 30 días anuales que se prevé en el ERE sean abonados por la constructora y además que haya garantías de que serán de cobro preferente. Por ello, los sindicatos quieren que se califiquen como créditos contra la masa, aunque por el momento no hay acuerdo sobre esta cuestión. En principio, el Fogasa cree que la vía del ERE es la correcta, pero también que legalmente las indemnizaciones de los trabajadores deben tener la citada categoría y asumirse como pagos preferentes.

En este punto, también se encuentran los sindicatos, aunque dudan de las intenciones reales de la empresa de asumir esas cantidades. En todo caso, la decisión final dependerá de los administradores judiciales de Proinsa, que son los que deben elevar la posibilidad al juez para que éste dictamine sin las indemnizaciones laborales deben ser créditos contra la masa.

No obstante, y pese a que falta por acordar esta cuestión, los abogados de la constructora lalinense aceptaron que las tres empresas -Proinsa, Seixo e Inyeuropa- sean consideradas como un grupo, aunque no admitieron por el momento los citados créditos contra la masa.

Entre los sindicatos existen diferentes posturas sobre el resultado final, aunque todos parecen aceptar los 30 días de indemnización con las citadas condiciones. Aún así, la CIG duda que haya acuerdo por la resistencia de la empresa a asumir los 10 días anuales que le corresponderían, pero UGT es más optimista y estima que finalmente habrá acuerdo.

Todas las partes, si hoy se produce un acercamiento, se han citado para el jueves a las 11.30 horas con el objetivo de cerrar un posible acuerdo final.