El nivel de enfrentamiento entre los cuerpos de Bomberos de O Salnés y Protección Civil de Vilagarcía, sin que se tomen medidas por parte de la Administración Local, ha llegado hasta tal punto que los trece trabajadores del parque contraincendios comarcal que actuaron el lunes en la extinción del fuego declarado en el edificio Dorna, interpusieron en la Comisaría una denuncia por negligencia contra la otra agrupación.

Los denunciantes les acusan de haber puesto en peligro la vida de las personas que residían en el edificio y la de los bomberos que estaban apagando el fuego, reavivado, según afirman, por la instalación de un turboventilador en la planta en que había comenzado el incendio.

La denuncia se compone de dos puntos, calificados como las situaciones de mayor conflicto en el caso del incendio del inmueble de la calle Juan Carlos I. Fue firmada por los 13 efectivos del servicio contraincendios que trabajaron en la extinción del fuego en el edificio Dorna.

El primero de ellos fue a la llegada de los Bomberos cuando se encontraron un camión escalera de Protección Civil en la zona que aún no se había posicionado. El cabo de guardia de los Bomberos pidió al presidente de Protección Civil que desplazara un poco el vehículo hacia adelante para permitir el acceso del otro camión escalera que está provisto de un cesto en el extremo que facilita el rescate de posibles víctimas.

Según el servicio contraincendios su escalera, además del cesto de rescate, es mucho más rápida en su despliegue y por lo tanto más efectiva. "En ese momento lo que más urgía es ver si había alguna persona atrapada en un piso y poder evacuarla rápidamente hacia el cesto. El de Protección Civil ni siquiera se dignó a contestar, bajó del vehículo, lo posicionó y nada más, sin dar razón alguna al cabo de guardia", explicó uno de los representantes sindicales de la agrupación de Bomberos.

El segundo punto que originó la denuncia por negligencia ocurrió más tarde cuando el incendio estaba medianamente sofocado en la planta octava, donde se originó, y el fuego se había concentrado en la zona de los trasteros.

"No sabemos quien le dio la orden directa a Protección Civil de poner un turboventilador. Lo encendieron cuando se le había dicho que no lo hicieran porque había peligro de reavivar las llamas arriba y que había personal tanto de Bomberos como de Protección Civil trabajando en la zona superior. Lo encendieron, alimentando el fuego con una corriente de aire que mandaba gases a la zona donde se estaban realizando las tareas de extinción", explicó el portavoz.

Inmediatamente después del encendido del turboventilador llamaron por la emisora los compañeros que estaban arriba diciendo que el fuego se estaba reiniciando por una alimentación que no sabían por donde venía. "Ésta venía por el encendido del turboventilador. Se les dijo que lo apagaran inmediatamente. La contestación fue: tu no eres quien para decirme a mí nada, yo tengo un superior y no apago el turboventilador. Se le volvió a decir, no lo apagaron, vino el presidente de Protección Civil y dijo que se podía poner perfectamente el turboventilador a funcionar y que nos leyéramos un manual de bomberos, que se podía ventilar perfectamente sin ningún tipo de problemas", declaró el portavoz.

Los bomberos señalaron que este asunto creó una gran tensión de la que pudieron salir gracias a la intervención de la Policía Nacional que medió y finalmente se consiguió que apagaran el turboventilador para poder reanudar las labores de extinción del fuego en los trasteros.

Los representantes sindicales de los Bomberos entienden que la situación no puede seguir así, trabajando ellos por un lado y Protección Civil por el otro. El caso del incendio del edificio Dorna culmina una serie de encontronazos entre ambas agrupaciones que vienen produciéndose desde hace cuatro años y que los profesionales del servicio contraincendios quieren que acabe de una vez. Dado que hasta el momento sus reclamaciones no han tenido eco, decidieron interponer denuncia por las situaciones de negligencia.

"A día de hoy no se ha puesto interés por ninguna de las partes para solucionar la situación que se viene produciendo desde que se abrió la subsede del parque en Vilagarcía. Podemos actuar coordinados; yo creo que sí. Lo que tiene que haber es algo que regule esa coordinación y eso sólo se hace si hay interés por las partes. Ni Concello de Vilagarcía, ni Consorcio Contraincendios fueron capaces de llegar a un acuerdo. Se amparan en una confrontación política absurda que no creo que sea justificada para estar como estamos. A nosotros lo que nos interesa es cumplir la legalidad, que está recogida en el Diario Oficial de Galicia, donde se modifican los estatutos del Consorcio do Salnés que dice que el servicio de Bomberos coordinará la emergencia" explicó el otro representante sindical.

Los delegados sindicales puntualizan que si a pesar de esto, el Concello de Vilagarcía entiende que la responsabilidad la debe llevar el grupo municipal de Protección Civil, que lo notifique por escrito y los bomberos acudirán a los servicios a coordinarse bajo las órdenes y la responsabilidad del mando designado.

"No tenemos ningún problema de coordinarnos con nadie, pero que nos lo comuniquen por escrito y que se hagan cargo. Pero de momento está el decreto que nos atribuye a nosotros la responsabilidad de la coordinación y tenemos que atenernos a ello. Aquí hay varias Administraciones implicadas y tienen que aclarar la situación", declaró el delegado sindical.

Los bomberos expresaron que el 29 de agosto plantearon a la alcaldesa la necesidad de elaborar un protocolo de actuación para acabar con este tipo de problemas, pero no han vuelto a tener respuesta.

Ayer a primera hora de la mañana, el responsable comarcal de UGT se reunió con la alcaldesa, Dolores García, quien le indicó que está esperando que Presidencia le remita el protocolo de actuación local. La regidora se comprometió a convocar una reunión cuando llegue el documento para aclarar la situación y acabar con este tipo de problemas.

Reacciones de la Alcaldía

Por su parte, la alcaldesa, tras mantener ayer sendas reuniones con los representantes de Bomberos do Salnés y de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil reiteró la necesidad de acabar con la imagen de descoordinación que están ofreciendo a la sociedad, "lo que no es bueno para nadie, comenzando por los propios servicios de emergencias".

Para acabar con esta situación, la regidora urgió a Presidencia que emita el informe sobre las coordinaciones de los dos cuerpos. Desde el Concello se recuerda que existe un acuerdo entre la Administración Municipal y la Dirección Xeral de Protección Civil de la Xunta de forma que, ante una emergencia, se movilizará en primer instancia a los medios y recursos municipales propios de Vilagarcía y, si dada la magnitud de la emergencia fuese preciso movilizar medios externos (bomberos do Salnés, Pontevedra, Salvamento Marítimo, etcétera) esto se haría a través del Centro de Coordinación de Emergencias de Galicia.

Tanto la alcaldesa como el gobierno local confían en "que el sentido común impere en las relaciones entre los dos cuerpos, que han demostrado una alta profesionalidad y cuentan con una enorme consideración por parte de la ciudadanía".

Plan de emergencia

Por su parte, el concejal de Independientes por Vilagarcía, IVIL, José Luis Rivera Mallo, ha formulado un ruego a la Alcaldía para que se adopten las oportunas gestiones a la mayor brevedad posible y que informe sobre las gestiones realizadas con el fin de actualizar el Plan de Emergencias Municipal, que fue redactado durante el mandato de Rivera en el Concello, entre los años 1987 y 1991.

Dado que han transcurrido muchos años, el documento ha quedado obsoleto, por lo que es urgente que se adapte a la nueva normativa y a las necesidades actuales del municipio.

De la necesidad de actualizar este documento también hablaron ayer los Bomberos do Salnés, quienes entienden que debe redactarse uno nuevo por parte de un equipo de profesionales en la materia, ya que en la redacción de estos planes de emergencia intervienen expertos en diversas disciplinas.