La Asociación de Empresas de Acuicultura Marina de Andalucía (Asema) está formada por firmas como Mejillones de Isla Cristina y Mejillones de Huelva, además de otras de Málaga, Cádiz y Granada.

En varias de esas empresas se invirtió capital gallego para hacer realidad la acuicultura de mejillón en aguas del Estrecho. Hace una década ya se explicaba que Mejillones de Andalucía S.L. instalaba las primeras tres bateas destinadas a este molusco en la ensenada de Getares. Juan Antonio Gallardo, el socio andaluz de esa empresa que nacía con participación gallega, llegaba a asegurar que "el nivel de producción en esta zona es superior a Galicia, donde el mejillón necesita unos doce meses para su crianza".

En aquella época se daba a conocer que Gallardo y sus socios gallegos apostaban por criar bivalvos en Algeciras y La Línea por tratarse de una zona que "aporta un sabor muy especial al mejillón". Aquellos movimientos iniciales sí habían generado preocupación entre los bateeiros gallegos, sobre todo porque se alertaba de la posibilidad de que se estuviera trasladando mejilla -la cría o semilla del molusco autóctono- a aguas andaluzas. Ahora las cosas parecen más calmadas. Además la Denominación de Origen Mejillón de Galicia también puede ser una garantía frente a la competencia andaluza.