Más de una década después de comenzar a elaborarse el proyecto, el centro de talasoterapia se ha convertido en el objetivo prioritario del grupo de gobierno de Vilanova, que quiere completar la zona deportiva y de ocio que se está creando en las inmediaciones de O Terrón. Así lo reconoce Gonzalo Durán, alcalde de Vilanova, que insiste en la necesidad de "sacar adelante este proyecto, que pondría a este municipio a la cabeza del termalismo y los tratamientos con agua de mar".

La intención es que la aprobación del Plan Especial que han presentado a la Consellería de Medio Ambiente "sea aprobado en los próximos meses tras haber corregido unas cuestiones técnicas sobre la conexión de las tuberías; el proyecto se adapta perfectamente a la Ley de Costas y al Plan de Ordenación do Litoral, por lo que no habría problema en la ubicación, tan solo nos faltaría la financiación", para lo que esperan contar con financiación de otras administraciones, ya que el montante global de la inversión supondría un desembolso de 3,6 millones de euros.

Precisamente por la financiación, el Concello de Vilanova ha llevado a los tribunales a la Diputación de Pontevedra, al considerarse seriamente perjudicado por el ente provincial tras su exclusión del Plan de Reequilibrio Territorial. "El proyecto que remitimos a la Diputación estaba perfectamente, por eso consideramos que se nos debe 1,5 millones de euros, por eso hemos optado por reclamarlo en el juzgado". El proyecto que se presentó a la Diputación contemplaba la construcción de dos piscinas de agua de mar, pero fue descartado al no cumplir con varios de los requisitos que se contemplaban en la convocatoria, pese a que desde el Concello niegan este extremo y aseguran que la Diputación actuó de forma "sectaria" lo que llevó a la administración local a recurrir a la vía judicial para reclamar esa aportación económica.

El Concello lleva más de una década comprando terrenos en la zona de O Terrón. De hecho, en los últimos meses se ha cerrado la adquisición de 3.000 metros cuadrados de superficie, para sacar adelante un proyecto que pretende regenerar y remodelar las antiguas canteras que había en esa zona. En el año 2004 se comenzó con la construcción del campo de fútbol de O Terrón, un espacio deportivo que ha ido creciendo poco a poco, incorporando un edificio para vestuarios y almacén, canchas polideportivos, estacionamientos y otros servicios, sobre todo relacionados con la salud.

La última piedra de este complejo será la construcción del centro de talasoterapia, cuyo proyecto presidió durante años la pasarela peatonal de O Terrón.