La Mancomunidade do Salnés contrató con una empresa de Vigo la colocación de trampas para avispas velutinas en varios puntos de la comarca, y los operarios estuvieron ayer en Ribadumia. Por la tarde, instalaron 60 botellas en el tramo del paseo fluvial del Umia que hay entre Barrantes y Cabanelas, pero cuando al atardecer regresaron por el mismo sitio para coger los coches se percataron de que ya no estaban.

El presidente de Protección Civil de Ribadumia, Andrés Otero, manifestó ayer su enfado por el comportamiento de la persona o personas que supuestamente sustrajeron las trampas. "Con esas botellas se habrían podido retirar 400 o 500 reinas. Y lo que pasará ahora es que esas reinas van a hacer sus nidos y Protección Civil no será capaz de atender todas las emergencias por culpa de cuatro desalmados".

Otero calificó lo sucedido de "vengonzoso", y considera que no se ha tratado de una chiquillada. "Las trampas estaban en sitios altos. Una persona con la mano no les llega", adujo.

La empresa contratada por la Mancomunidade estuvo ayer en Ribadumia, con la intención de instalar unos 300 artefactos en este término municipal, con los que atrapar las reinas del insecto invasor, que está haciendo mucho daño en las colmenas de abejas de toda Galicia. Los operarios contaron con la colaboración de voluntarios de Protección Civil de Ribadumia, que les acompañaban para mostrarles los lugares donde más avispas aparecieron en años anteriores.

Uno de los espacios más delicados es precisamente el sendero que va a orillas del río Umia, de ahí que allí se colocasen más de medio centenar de trampas. Según Andrés Otero, lo hicieron por la tarde, pero al terminar su jornada y desandar el camino para coger el coche se encontraron con que alguien las había quitado ya. "Quien lo hizo, lo hizo por capricho", espeta Otero.

Control de la plaga

La de Ribadumia es una de las agrupaciones de Protección Civil que se han sumado al plan de lucha contra la velutina, pues en años anteriores crearon un equipo para la retirada de las colmenas. A cambio, recibieron trajes y material específico por parte de la Xunta de Galicia.

El número de avisperos detectados en los últimos veranos se ha multiplicado exponencialmente en O Salnés, si bien la arousana aún no es de las comarcas más castigadas por la llegada de esta especie invasora. El presidente de los voluntarios recuerda que el control de la plaga es una tarea que de una u otra forma afecta al conjunto de la sociedad, y lamenta comportamientos como el de ayer.