La IV edición de la Carreirón 10K, la carrera popular impulsada por el club Punta Cabalo Arousa Runners de A Illa, reúne hoy a un total de 600 participantes distribuidos entre las diferentes categorías que se han habilitado. Con esta cifra, la prueba completa el número máximo de inscritos, una cifra que se cerró hace semanas, pese a que la organización sigue recibiendo peticiones de gente interesada en participar.
La carrera tendrá un recorrido muy similar al de la anterior edición, partiendo desde la avenida Valle-Inclán para recorrer varias calles del casco urbano antes de desembocar en Riasón. Desde ese punto, los corredores irán bordeando el litoral por lugares como Cantiño, O Naval, punta do Campelo, faro de Punta Cabalo, Area da Secada, Niño do Corvo, hasta desembocar de nuevo en la avenida Valle-Inclán, donde se ubica la meta.
Los primeros en abrir fuego serán los atletas de las categorías cadete y juvenil, que se situarán en la línea de salida a las 9.30 horas para recorrer una distancia de 2.000 metros. Alevines e infantiles harán lo propio a partir de las 10, aunque su recorrido será de 1.500 metros. La prueba sénior arrancará a las 10.30 horas, con 350 participantes, la cifra máxima estipulada por la organización. Una vez finalizada la carrera principal llegará el turno a los más pequeños, que recorrerán distancias de entre 100 y 500 metros, dependiendo de su edad.
La prueba se celebra todos los años coincidiendo con el Día da Nai, lo que llevará implícito un pequeño homenaje a todas las madres participantes. Todas ellas saldrán a la cabeza del pelotón en la calle Valle-Inclán, y la primera que alcance la línea de llegada se llevará un premio y un ramo de rosas como reconocimiento.
Amadeo Abal, atleta de Cambados que disputa el circuito nacional y que el pasado año finalizó en la segunda posición, es uno de los grandes favoritos en la carrera masculina, mientras que la ganadora del pasado año, Ángeles Castro, se perfila como la apuesta segura en esta nueva edición. También habrá premios para los primeros "Carcamáns" que crucen la línea de llegada en Valle-Inclán.
