Colectivos animalistas se concentraron ayer a las puertas del Concello de Meis, en Mosteiro, en apoyo a la labor que está desarrollando la Pradera de Bea Heyder, una entidad que recoge animales abandonados y que se encuentra en el centro de la polémica por el enfrentamiento que mantiene con sus vecinos, en el lugar de A Medoña. La concentración tenía como objetivo visibilizar el apoyo a su propietaria, Bea Heyder, y respaldarla en el conflicto. Los asistentes a la protesta acudieron acompañados de varios perros que han sido acogidos en este refugio.

Los problemas entre esta entidad y los vecinos comenzaron tras quejarse estos de los ruidos y los malos olores que producen la treintena de perros, varios caballos y otros animales que se refugian en este centro de Meis, unas quejas que Heyder no comparte en absoluto. Las quejas llegaron hasta la administración municipal, que ha intentado mediar, de momento sin éxito, entre las dos partes y tratando de encontrar una solución, que podría pasar por un cambio de ubicación del centro a un lugar alejado en el que los vecinos no acabasen siendo molestados

Mientras se busca un lugar para reubicar la Pradera, el conflicto con los vecinos ha ido recrudeciéndose, motivo por el cual, varios colectivos animalistas han decidido darle su apoyo ante lo que consideran un "acoso" hacia la responsable del refugio. De hecho, Heyder ha llegado a presentar dos denuncias ante la Guardia Civil, al considerar que está siendo acosada para que abandone la actividad que desarrolla en ese lugar.

El alcalde de Meis, José Luis Pérez, ha intentado mediar en varias ocasiones entre las dos partes en conflicto y todavía confía en que pueda alcanzarse un acuerdo satisfactorio para la Pradera y para los vecinos afectados. El regidor también ha recibido críticas por parte del PSOE de su supuesta escasa implicación en la resolución del conflicto.