La comisión de fiestas de San Gregorio, en Paradela (Meis), repartió ayer en torno a un millar de raciones de comida en su romería, con la que se cierra la Pascua en O Salnés. Hasta el último momento planeó sobre la celebración la amenaza de la lluvia, pero finalmente solo cayeron unas pocas gotas a primera hora de la mañana, lo que permitió que el grueso de las actividades religiosas y lúdicas se celebrasen con normalidad.

De todos modos, la lluvia tampoco iba a aguar las ganas de vecinos y visitantes de pasar un buen rato en el Campo da Boca, y el recinto festivo pronto se llenó de gente, hasta el extremo de que durante la misa campestre de mediodía casi no cabía un alfiler en la carpa de 900 metros cuadrados bajo la que iba a tener lugar la comida.

Los actos centrales empiezan con la llegada del bollo pascual al campo, procedente de la panadería Paradela, donde se coció durante la tarde-noche del sábado.

Después queda expuesto en las inmediaciones de la capilla, mientras se celebra la misa campestre y sale la procesión, que dura una media hora. Durante la misma salen las imágenes de San Gregorio, que los vecinos de Paradela consideran milagroso para los males de estómago, y las de Santa Margarita y la Virgen del Carmen.

Las tres permanecen guardadas en la capilla, y mientras Santa Margarita y el Carmen fueron donaciones de unas familias de Vilanoviña, el San Gregorio fue adquirido en su día por la comunidad de montes de Paradela, entidad que también costeó la construcción del Campo da Boca y de la propia capilla.

Una vez terminaron los actos religiosos, se procedió al reparto de la comida, que consistía en churrasco, un trozo de bollo pascual y una botella de medio litro de vino albariño, todo ello al precio de seis euros. Mientras la gente comía se inició la animación musical.

La comisión de fiestas contrató a varios grupos y artistas para amenizar la jornada, ya que es habitual que muchas familias se queden tras la comida y alarguen la sobremesa para bailar. Fue Marieta la encargada de interpretar el primer pase, mientras que las familias con niños tuvieron la oportunidad de distraerse con los juegos hinchables y las atracciones situados a un lado del campo.

Una de las novedades de esta edición es el nuevo aspecto del Campo da Boca, pues los comuneros de montes han procedido a asfaltar las pistas interiores y a empedrar la parte delantera del atrio de la capilla.

El San Gregorio de Paradela es conocido sobre todo por su gran bollo pascual, que mide unos cinco metros de largo por unos dos de ancho. Para elaborarlo se utilizan unos 60 kilos de harina y unos 6.000 huevos. La cocción del dulce dura unas ocho horas.