Casi una veintena de barcos de los puertos de O Grove y Cambados participarán finalmente en la campaña de la "xarda" en el Cantábrico. Los de Cambados ya han salido rumbo al norte, mientras que los de O Grove lo harán entre el sábado y el domingo.

En principio, prevén que la campaña dure en torno a una semana, puesto que la flota de Pontevedra tiene un cupo de 500 toneladas de caballa capturadas con pesca dirigida. Sin embargo, aún no han perdido la esperanza de que la Secretaría General de Pesca les conceda algo más de pescado.

El patrón mayor de O Grove, Antonio Otero, afirmó ayer que "estamos a la espera de que la Secretaría General de Pesca concrete una promesa que nos ha hecho. Pero por ahora solo es eso, una promesa". Los armadores de la provincia de Pontevedra habían decidido inicialmente no participar este año en la costera de la "xarda", debido al escaso porcentaje de cuota que les otorgaba el Gobierno central.

Así, a la flota de Pontevedra le correspondía menos del 5 por ciento de la pesquería dirigida -aquella en la que la "xarda" es la especie principal de la jornada de faena-, pese a disponer del mayor número de barcos de todo el litoral norte peninsular.

Argumentan que con ese porcentaje incluso perderían dinero en la campaña, ya que subir al Cantábrico a pescar acarrea unos gastos de combustible y manutención importantes, a los que hay que sumar que durante más de 10 días los barcos dejan de pescar debido al cambio de aparejos.

Cambiaron de parecer

Pero al final algunos armadores reconsideraron su decisión. El hecho de que algunos se diesen de alta en puertos de la provincia de A Coruña para de ese modo disfrutar de un trozo más grande del pastel, y la interminable sucesión de temporales en la costa gallega durante el invierno, hizo pensar a más de uno que sería mejor subir aunque se ganase poco, que quedarse en la ría de Arousa.

Los más madrugadores fueron los pescadores de Cambados, que subieron en varias etapas desde el lunes por la tarde. Fueron ocho barcos, de entre cuatro y cinco tripulantes cada uno, e hicieron el viaje todos por mar.

En lo que respecta a O Grove, irán a pescar al Cantábrico entre 10 y 12 barcos de bajura, de cinco tripulantes cada uno. Tienen previsto viajar entre el sábado y el domingo, e irán todos juntos, "porque da mal tiempo", arguye Otero. Irán todos por mar.

La previsión de los armadores de O Grove es hacer puerto base en la localidad de Burela (Lugo), desde donde se moverán en función de la pesquería, por lo que tampoco descartan acabar en Asturias algunos días.

El patrón mayor grovense explica que al final los armadores optaron por ir al Cantábrico, "porque en esta época aquí no se pesca casi nada". "Además, van con la expectativa de que al final puedan pescar un poco más", en alusión a la supuesta promesa que la Secretaría General de Pesca habría hecho a la Federación Galega de Confrarías.

Los pescadores de Pontevedra decidieron que la pesca dirigida de la caballa en el Cantábrico empezará el lunes. La que empezó ayer fue la accidental, que es la que practican los barcos que se han quedado en Arousa, y en la cual la "xarda" aparece como especie acompañante.

En años anteriores, la pesquería del Cantábrico fue una válvula de escape importante para los armadores arousanos, porque aunque el número de los que "emigran" no es muy elevado, y en los mejores años tampoco pescaron mucho más de dos semanas, en la práctica eso permite que el resto de la flota pueda trabajar de forma más holgada, en una época en la que por unos u otros motivos la pesca escasea.