- ¿Cuál es el instrumento más antiguo de la colección que usted posee?

- Quizás un clarinete de finales del siglo XVIII, pero tenemos alguna pieza también de gran valor, y que puede ser incluso más antigua, como es el caso de una corna, instrumento de viento muy arraigado en nuestra tradición, que se tocaba en Noruega, Irlanda, y toda la fachada atlántica europea. Se documenta su uso hasta mil novecientos treinta y pico, y desapareció desde entonces. Esta pieza (la cual muestra de su propia mano) la encontró un vecino de Sarria, llamado Carlos Tallón, en el monte hace cuestión de 15 años. Se trata de un cuerno de animal con agujeros laterales a modo de flauta, pero que se toca como una trompeta. Al ser hallado en el monte no sabemos con certeza los años que puede tener.

- ¿Y se mantenía en perfecto estado?

- Sí, porque el vecino lo que se encontró en el monte fue un montón de muebles viejos, y en interior de una cómoda halló, entre otras cosas, esta corna más un candil, que fueron las piezas que extrajo de aquel mueble y con las que se quedó.

- ¿Cuál diría es el instrumento exótico de la colección?

- Quizás un shofar que adquirí en una visita a Arabia, y que me hizo plantearme entonces el darle forma a esta colección.

- ¿Y ese instrumento que no posee y que le haría ilusión?

- Me haría ilusión un toyo, que es una flauta de pan de más de dos metros que es tradicional de Bolivia, y también un oficleido, un instrumento del siglo XIX que solo tuvo 20 años de vida, pero en Galicia tenemos fotografías con gente tocando este instrumento hasta los años 50.