Las medidas de seguridad son más laxas en el caso de los institutos, ya que sus alumnos son ya de a partir de 12 años. En el Castro Alobre, de Vilagarcía, los alumnos de ESO (hasta 16 años) llegan y se marchan solos, pero no pueden abandonar el recinto escolar en los recreos. Los de Bachillerato, a partir de 16 años, sí pueden salir del instituto e ir a tomar algo a una cafetería o comprar algo en un supermercado de la ciudad. Pero para ello necesitan un permiso expreso de sus tutores, que deben entregar a principios de curso. El director del instituto Ramón Cabanillas (Cambados), Ramón Martínez, apunta que este curso no están pidiendo el permiso paterno para dejar salir a los mayores de 16 años en el recreo -los menores de esa edad no pueden abandonar el recinto-, pero que es muy probable que sí lo pidan a partir de septiembre. En el Cabanillas, además, los profesores procuran estar vigilantes a la llegada de los autobuses y a su entrada en el centro.