Dos entidades y una misma filosofía es la seña de identidad de la comunión existente entre los clubes de natación y salvamento, ambos respondiendo al nombre de Vilagarcía. El trabajo que vienen realizando en pro de poder desarrollar su pasión competitiva dentro del agua se está traduciendo en unos resultados más que destacados en eventos autonómicos e incluso nacionales.
Fernando Vicente, presidente del Club Natación Vilagarcía, define a la perfección la dualidad en la que cohabitan dos entidades que incluso comparten miembros tanto en lo deportivo como en lo directivo. "Tenemos dos estructuras jurídicas diferentes, pero en la planificación deportiva distribuimos los entrenamientos de manera voluntaria. El entrenamiento de salvamento tiene una base pura de natación. Eso nos beneficia para el salvamento".
Nacidos a partir de una ilusión centrada en las competiciones en piscina, la puerta del salvamento se abrió como un complemento y una posibilidad de seguir compitiendo a cielo abierto. Vicente destaca que la buena base en el trabajo en piscina se hace notar en las pruebas de habilidades que se desarrollan en las playas durante el verano, "es una fórmula para añadir atractivo a la natación en verano y aprovechar en ese tiempo el gusto por entrenar en un escenario diferente a la piscina. Hay un calendario de pruebas de verano en playa. Nos ha beneficiado mucho que nuestros deportistas tienen un entrenamiento muy de natación. Luego al irnos al campo del salvamento ayuda a que tengamos a algunos de los mejores nadadores de Galicia".
El crecimiento estructural del club en los últimos años ha tenido para el presidente del Club Natación Vilagarcía una eclosión muy clara, que sitúa en 2016, "el punto de inflexión fue el poder disponer de la segunda calle para poder entrenar. Eso también ha ayudado a que hayamos ganado algún trofeo en mariposa, algo impensable cuando solo podíamos entrenar prácticamente hacinados en una calle. Creo que esto demuestra que, a veces, con unas condiciones mínimas se pueden conseguir muy buenos resultados".
El acuerdo alcanzado entre Serviocio, empresa concesionaria de la piscina municipal, y el Concello de Vilagarcía permite a los nadadores federados de la localidad el disponer de dos calles todos los días entre las 19.30 y las 21.30 horas. A ello añaden una hora más con una sola calle a partir de las 18.30 horas. En esta línea la intención de ambos clubes es la de poder disponer de la segunda calle una hora más para, según Fernando Vicente, "establecer una estructura piramidal. Si tenemos un cuello de botella no podremos crecer. En la primera hora es clave disponer de una segunda calle porque es cuando entrenan los niños de 6 a 8 años y si tenemos que limitar las plazas estamos poniendo en peligro el ciclo deportivo de la entidad. Al no poder admitir más niños es una manera de estrangular al club".
Con 73 licencias en salvamento y 71 en natación, las directivas tampoco pasan por alto que "entendemos que Serviocio también tiene sus intereses, pero somos de los que pensamos que el fomento de la natación también irá en beneficio de la concesionaria. Entonces consideramos que nuestra petición de una calle más por una hora es algo de lo que se pueden ver beneficiadas todas las partes".
Incluso desde los clubes quieren lanzar un guante y se muestran predispuestos a ceder a la concesionaria la atención a aquellos futuros integrantes del club que todavía no tengan el nivel mínimo para acceder a los entrenamientos en las calles asignadas a tal efecto. Vicente pone algún ejemplo al respecto, "Ponteareas tiene un acuerdo para que los niños que no sepan nadar se destinan a la empresa concesionaria. Es una entente cordial que aquí no se da y sería bueno que hubiese ese feedback y debería fluir de una manera natural. Esa colaboración podría solventar el problema y los que entrarían en el club ya vendrían con una base formativa. Incluso algún adulto que nos viene lo apuntamos para que vaya a un curso de perfeccionamiento de la piscina".
El proyecto de construcción de una segunda piscina en Vilagarcía anunciado por el gobierno municipal fue acogido como agua de mayo, aunque a nadie se le pasa por alto que el frente que demanda mayor urgencia es el referido al presente y al día a día, "pero nosotros tenemos que seguir tejiendo sin parar para que todo el trabajo tenga una continuidad necesaria", apuntó Vicente.
Esa nueva piscina podría además resolver uno de los problemas irresolubles hasta la fecha y que impide que Vilagarcía pueda acoger cualquier prueba de los campeonatos autonómicos de natación o de salvamento. Y es que el no disponer de una grada para el seguimiento de las pruebas echa por tierra esta posibilidad. Es por ello que los nadadores vilagarcianos siempre han tenido que competir como visitantes, algo inimaginable en cualquier otra disciplina deportiva.
A este respecto, lo mismo sucede con las pruebas de salvamento en playa. Y es que la Federación Gallega ha desestimado en su momento que A Compostela pueda acoger una competición porque su arena no reúne las condiciones mínimas y la playa de O Preguntoiro no tiene el tamaño exigido.
