Hace años que por una u otra razón la crispación política está instalada en el Ayuntamiento de Vilanova. La situación está tan enquistada que incluso ha adquirido ya un rango de cierta normalidad. Pero periódicamente los enfrentamientos entre el gobierno local del PP y alguna de las fuerzas de la izquierda en la oposición traspasan la fina línea roja que separa el debate de la descalificación, y se termina en la violencia verbal. Así volvió a suceder ayer en el transcurso de una moción del PSOE sobre el mal estado del pabellón de deportes de Vilanova, que defendió el concejal Ramón Trigo.

Según testigos presenciales, durante la intervención de éste se produjeron varias interrupciones, alusiones personales a familiares de algunos de los ediles y hasta se pronunció la palabra "sicarios". La tensión fue subiendo de tal modo que llegó un momento en que el alcalde ordenó la expulsión de Trigo de la sala de sesiones. Sus compañeros del PSOE también se fueron de la sala en señal de solidaridad.

El sueldo del gobierno

El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, no entró en debate en el momento en que se votó la moción de Gañemos en la que pedía la reducción de su sueldo y de los demás concejales liberados. "Eso es una tontería, y no vamos a perder el tiempo con tonterías", espetó horas antes de empezar la sesión a preguntas de FARO.

Gañemos aducía en su moción que el Ayuntamiento de Vilanova es uno de los más endeudados de Galicia, y que está situación está provocada por la supuesta mala gestión de Durán y su equipo. Por ello, pedía que el alcalde pase a cobrar unos 20.000 euros brutos al año, y los ediles liberados a tiempo completo, menos de 14.000.

El regidor dijo antes del pleno que se trata de un asunto estéril y demagógico. "La oposición en Vilanova tiene un nivel de circo. A ver si empiezan a traer a pleno asuntos un poco más interesantes". Además, espetó que no es la primera vez que Gañemos plantea una medida de esas características, y que "como gracia una vez está bien, pero después de la primera vez ya se convierte en estupidez".

Asimismo, la concejala de Gañemos preguntó al final de la sesión por la relación empresarial de uno de los concejales del equipo de gobierno con el político ruso Aleksander Vasilenko, que según Gañemos actuó en 2013 de nexo entre el Partido Liberal de Rusia y el Partido Popular español para propiciar cambios legislativos que favoreciesen la inversión rusa en España.

Vasilenko está afincado en Marbella y tiene negocios inmobilarios. El año pasado presidió el grupo de peregrinos cosacos que hizo la Variante Espiritual a Santiago. Desde el gobierno se le contestó que se trata de un asunto particular del concejal interpelado.

Retranqueo en los caminos

En la sesión se aprobó la modificación puntual número 17 de las Normas Subsidiarias, que afecta a los vecinos con propiedades en los núcleos rurales tradicionales o en los llamados suelos mixtos (industrial-residencial).

Actualmente, tienen que separar sus construcciones ocho metros con respecto al eje de las pistas y caminos de titularidad municipal. Pero la Lei do Solo de Galicia permite reducir esa distancia de retranqueo a seis metros, y el Concello se ha acogido a esa posibilidad, por lo que los vecinos ganan ahora un par de metros para sus cierres o construcciones.

En la comisión informativa previa al pleno, los partidos de izquierdas se abstuvieron. La edil de Gañemos, Elena Cores, considera que esta modificación puntual es injusta, pues según ella crea una diferencia entre los vecinos cuyas parcelas lindan con un camino de titularidad municipal y aquellos otros que las tienen al lado de otro tipo de carreteras. "Hay que luchar porque Vilanova tenga un PXOM".