Ser Jardín de Excelencia Internacional es una de las mayores distinciones a las que puede optar una propiedad. La declaración la realiza la Sociedad Internacional de la Camelia, y se trata de un club tan selecto que en toda Galicia solo hay dos jardines que puedan presumir de ese distintivo: el del pazo de Rubiáns, en Vilagarcía, y el del castillo de Soutomaior, en el municipio de ese mismo nombre. Pero este año podría haber otros dos, y ambos están en O Salnés.

Los jardines de Quinteiro da Cruz, en Ribadumia, y A Saleta, en Meis, llevan más de un año trabajando en sus candidaturas, que en esta primera mitad de enero entran en una fase decisiva, pues recibirán la visita de los auditores de la Sociedad Internacional de la Camelia. Si ambos alcanzan el sueño de ser de Excelencia Internacional, de los cuatro jardines de ese tipo existentes en Galicia, tres estarían en O Salnés, lo que supondría un impulso decisivo para la promoción de la comarca como destino de turismo verde y cultural.

Para ser Jardín de Excelencia Internacional no solo se prima el hecho de disponer de una colección de camelias amplia y variada, sino que también se premian las propiedades ricas en otras especies vegetales singulares o que posean atractivos de tipo arquitectónico, artístico o histórico.

Las candidaturas les ha supuesto tanto a Quinteiro da Cruz como a A Saleta un ingente trabajo para poner al día sus instalaciones, y contaron con la colaboración de los biólogos de la Estación Fitopatolóxica do Areeiro, que depende de la Diputación de Pontevedra. Los trabajos necesarios fueron de lo más variados, como la catalogación de las plantas o su correcta identificación con unas etiquetas bien presentadas.

Se da la circunstancia de que tanto Quinteiro da Cruz como A Saleta forman parte de la Ruta da Camelia, un producto turístico auspiciado en su día por la Xunta de Galicia y la Diputación de Pontevedra. Se trata de dos jardines de gran belleza e interés, que ya están trabajando en la nueva campaña de visitas de invierno, pues la mejor época para ver camelias es durante la segunda mitad del mes de febrero y el de marzo. Eso sí, siempre y cuando las condiciones meteorológicas no adelantan excesivamente la floración.

El pazo de Rubiáns también pertenece a esta Ruta da Camelia, en la que se encuentran fincas gallegas muy emblemáticas, como las de los pazos de Rivadulla, Oca o Quiñones de León, o el castillo de Soutomaior.

Efectos de la sequía

Las plantas han acusado la prolongada sequía que ha sufrido Galicia hasta hace apenas dos semanas, y los camelios no han sido ajenos a ella. Silvia Rodríguez, de A Saleta, apunta al respecto que además las temperaturas relativamente altas han propiciado también un adelanto de la floración. "Algo que nos pregunta mucho la gente es cuándo es el mejor momento para venir a ver el jardín, y aunque es cierto que febrero y marzo son tradicionalmente los mejores meses para ver camelias, no hay que olvidar que la naturaleza va por libre".

Beatriz Piñeiro, de Quinteiro da Cruz, apunta otro ejemplo de en qué medida la inusual meteorología de los últimos meses en Galicia está afectando a su jardín. En él, cultivan desde hace tiempo una variedad de camelia "changii" que suele florecer en agosto. "Y en estos momentos ya tenemos un ejemplar que ya tiene capullos", explica. Eso implicaría una segunda floración anual, algo completamente inusual.

Esta finca de Ribadumia ya ha tenido varias visitas en estos primeros días de enero, incluidas siete en Año Nuevo de turistas de Asturias y Madrid, y a un grupo de expertos argentinos en el mundo del té, que Quinteiro da Cruz cultiva.