La alternativa más ágil para desbloquear la tramitación de la revisión del Plan Xeral de Ordenación Municipal de Vilagarcía será aceptar la renuncia al contrato por parte de la empresa Eptisa y separar el proceso de forma que los trámites que faltan hasta la aprobación inicial del documento se puedan adjudicar por asistencia técnica o contrato menor. El alcalde, Alberto Varela, confía en poder completar esta primera parte durante su mandato. Así lo explicó ayer en junta de portavoces de los grupos políticos de la corporación municipal reunida con el objetivo de abordar las alternativas para continuar con la revisión urbanística.

Varela Paz recordó que desde el año 2008 Eptisa trabaja en la revisión del PXOM de Vilagarcía, y que en el año anterior fue absorbida por un grupo chino. La nueva dirección de la consultora se reunió con la representación municipal y expuso que iba a continuar con los trabajos urbanísticos de Vilagarcía, que eran su prioridad. Así se llegó a completar el documento para presentar a la Xunta de Galicia.

Sin embargo, cuando la administración autonómica solicitó más información para completar los trámites la situación en Eptisa había cambiado de forma radical. La empresa había eliminado su línea de planeamiento y despedido a los trabajadores de esta sección, por lo que propuso al Concello de Vilagarcía la cesión del contrato a la sociedad formada por sus antiguos empleados.

Si bien esta alternativa parecía la solución más adecuada, porque estos técnicos ya conocen el estado de tramitación del documento urbanístico vilagarciano, la propuesta chocó frontalmente con el sistema de contratación pública. El informe jurídico municipal indicó que la cesión de contrato es imposible porque éste expiró oficialmente en 2012. La consultora argumenta que no se le puede achacar la responsabilidad del retraso cuando hasta 2015 el Concello no quiso enviar el documento urbanístico a informe de la Xunta. Pero este argumento no resuelve el hecho de que el contrato, a efectos administrativos, expiró hace tiempo.

La solución sería volver a sacar a contratación la revisión del planeamiento municipal, lo que supondría empezar de cero con el documento.

"Trabajamos para buscar una solución intermedia y factible y es establecer una primera parte contratando el trabajo hasta la aprobación inicial del PXOM y la exposición pública del documento, mediante la figura que permite la ley de contrato menor. Una vez que se exponga el documento al público, habrá que sacar a concurso público la otra parte hasta la aprobación definitiva", explicó el regidor municipal.

Mediante este nuevo contrato de licitación pública la adjudicataria tendría como misión resolver las alegaciones presentadas por los vecinos, efectuar las correcciones del documento urbanístico y llevarlo hasta la aprobación definitiva.

Alberto Varela explicó a los portavoces municipales que la decisión más ágil, y que será la que se adopte, es aceptar, en la próxima sesión de la Xunta de Goberno Local, la renuncia al contrato por parte de Eptisa y decidir el pliego de bases para la realización de un contrato menor por el sistema de negociado sin publicidad.

Otra opción es el contrato de asistencia técnica, pero está limitado a una cuantía económica que puede superarse en este trabajo. El alcalde entiende que el proceso para la formalización del nuevo contrato con destino a la aprobación inicial del PXOM podrá completarse en el plazo de dos meses, dado que el Concello da máxima prioridad a este asunto.

La nueva consultora entregaría en dos semanas los informes solicitados por la Xunta de Galicia, por lo que en seis meses podría estar resuelta la tramitación para poder elevar el documento a la aprobación inicial por parte de la corporación municipal. Una vez que sea aprobado por el pleno la revisión del PXOM se somete a exposición pública a efectos de presentar alegaciones. Todo este proceso debería estar antes de mayo de 2019, fecha en que se celebrarán las elecciones municipales.

"Hay algunos alcaldes a los que les da miedo aprobar un PXOM, pero a mí no me da miedo ninguno. Vilagarcía debe tener un documento urbanístico actualizado", declaró Varela.

El regidor vilagarciano se reunirá con los alcaldes de otros 17 municipios afectados por el cambio de líneas de trabajo de la consultora Eptisa para apoyarse y solicitar de forma conjunta a la Xunta que mantenga las ayudas económicas para la redacción de los planes urbanísticos en trámite, aunque reconoció que las circunstancias de cada concello son distintas.